El Valencia CF lanzará a finales de la próxima semana la campaña de abonos de la temporada 21-22. No será una campaña al uso por la singularidad del momento, aunque su espíritu es adaptarse a todos los escenarios en función de cómo evolucione la pandemia. De entrada solo se contemplan renovaciones y que los abonos como tal solo estén disponibles a partir de la segunda parte de la temporada, cuando el club calcula que no habrá restricciones de aforo y podrán asistir a Mestalla al menos 40.000 espectadores. 

Hasta entonces el sistema será de ticketing normal con descuentos del 50 por ciento en las localidades sueltas para socios. Con la intención de ser transparentes y justos mediante un sistema de ajustes, aun siendo conscientes de multitud de singularidades y con la previsión de que se perderán abonados por cuestiones deportivas, económicas y de desafección con la propiedad, desde el departamento de marketing entienden que se trata de una alternativa con la que no cobrar por adelantado partidos en los que no existe la garantía de disfrutar del abono. 

El modelo híbrido de la campaña de abonos del Valencia CF pasa por lanzarla, cobrar de salida solo la segunda parte de la temporada y en el caso de que caigan las restricciones antes activar el abono cuando todos los socios puedan sentarse en su sitio y cobrar la parte proporcional, lo mismo en este último caso si es al revés y lo que toca es devolver.

¿Qué te parece la nueva campaña de abonos del Valencia CF para la 21/22?

  • 847
  • 249
  • 305

Precios congelados en la campaña de abonos del Valencia 21/22

El otro gran titular de la campaña son los precios “congelados” en abonos y entradas. Lo cierto es que son los mismos que en la 19/20, con un intercambio entre partidos de los clubes que han perdido la categoría y los nuevos. Pese a las palabras de Anil Murthy que generaron polémica sobre su intención de subirlos, la explicación oficial es que el presidente se refirió a un ejemplo de gestión en el fútbol en general y que no es aplicable a los pases. El matiz, sin embargo, es el del abono total. Y es que ahora no hay Champions. En la 19/20 el socio disfrutó de 30 partidos (récord de disputados) partiendo de un fijo de 22. En la 21/22 serán solo 19 a expensas de la Copa. El precio fue subiendo desde la 17/18, su pico más bajo con 277 euros de media. En la 19/20 fue de 360, el mismo que en esta. Proporcionalmente, por tanto, el abono sí que es más caro tras no haber contemplado el escenario de una rebaja. 

Tras haber mantenido la condición de socio de manera gratuita durante la 20/21, ejercicio en el que se vendieron entradas con aforo reducido en la última jornada contra el Eibar, para la campaña se tendrán en cuenta también las opciones de compensación respecto a los abonados que no pudieron disfrutar la 19/20 completa, en concreto aquellos que renunciaron a la devolución del dinero o que escogieron la compensación a futuro del 25 por ciento. Alrededor de 25.000 tienen derecho a descuentos. A efectos de las bonificaciones por asistencia, el último partido contra el Betis disputado en 2020 contará como asistido para todos como gesto por la incertidumbre existente ya entonces con la pandemia en sus inicios. 

La cuestión es que en la primera parte de la temporada se venderán entradas sueltas para los socios al 50 por cien del precio equivalente a si se comprasen todos dentro del abono. Para el club esto es un inconveniente a nivel de logística, aunque a cambio valorar que no se discriminará entre quién puede entrar y quién no mientras el aforo no sea completo. Aplicando descuentos, el aficionado pagará un 22 por ciento menos en promedio respecto al precio de venta normal. 

Tras el último anuncio de la Generalitat sobre eventos abiertos, a día de hoy a Mestalla solo pueden entrar alrededor de 3.000 personas. Ese sería el escenario si no hay cambios para el Trofeo Naranja, en el que pondrán precios populares. Hay que añadir además, la obligación de mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros cuando caiga la anterior restricción. Es decir, que solo sería utilizable una de cada nueve butacas del estadio (entre 9.000 y 10.000) teniendo en cuenta la distancia a los lados, adelante y atrás. En este sentido sería más ventajosa la obligación de mascarilla y no de distancia. Otra opción a estudiar es la agrupación por asientos para unidades familiares. La realidad es que para LaLiga la previsión es ocupar el cien por cien pero luego decide cada comunidad autónoma y en el caso de la valenciana las medidas son restrictivas y afectan por igual a todos los recintos abiertos con independencia de su capacidad máxima. 

 Entradas web y taquillas cerradas

Otra de las singularidades es que la compra de entradas será vía web ya que las taquillas siguen cerradas. El precio está marcado por zonas y en función del peso específico de cada partido. Será público para los socios y se ha calculado en base a los de la 19/20 respecto al total. Por ejemplo, el precio del partido contra el Barça corresponde al 12 por ciento del abono, el del Sevilla el 6, el Levante el 4...

En el abono solo se incluyen los partidos de liga aunque todo lo demás es gratis salvo finales y amistosos. La diferencia está con el abono total en el que se incluía todo. La apuesta del Valencia es que a partir del 1 de enero no habrá ninguna restricción pero lanza la campaña ahora, tras haber consultado también con aficionados en desayunos informativos, y ganar tiempo en gestiones además de asegurarse ya una fidelidad del abonado y la conservación de la antigüedad. El socio que no renueve ahora perderá el derecho a su compensación y al menos sobre el papel no hay previsto campaña de nuevas altas a mitad de temporada. 

El Valencia conserva a 39.800 abonos de la última temporada, el tope máximo por recomendación de UEFA para la Champions y en sus cálculos contempla una caída importante. Se mantiene también la grada animación, donde todo el mundo puede renovar de 16 a 25 años, incluidos los que entraran en ese margen el año pasado cuando no hubo campaña.  

Te puede interesar:

La campaña implica también una serie de cambios claves que mantendrá su vigencia los próximos años: pago exclusivo por domiciliación 100%, abono digital, cashless (pago solo con tarjeta dentro del estadio), zona 100% libre humo (tampoco se podrá fumar en vomitorios, ni siquiera en zonas específicas y apartadas) y contactos recurrentes para tener feedback con la afición. En todo caso, se habilitará un teléfono de cita previa para los mayores de 65 años que pidan acudir a taquillas. Los cálculos internos apuntan a un riesgo alto de perder a aficionados en este rango por el nivel de digitalización.