OPINIÓN

Mestalla es un gran argumento competitivo

La unión hace la fuerza y esta plantilla tiene el respaldo de una hinchada que reconoce su honradez sobre el campo

Aficionados, en Mestalla

Aficionados, en Mestalla / Francisco Calabuig

Pau Pardo

Pau Pardo

El miércoles se pudo vivir en Mestalla una de esas noches en las que la que el valencianismo se convierte en un argumento competitivo de mucho calado. No solo por el estimulante recibimiento al autobús del equipo, que prendió la mecha de las pasiones horas antes de que el balón echase a rodar, sino por el papel real que el estadio jugó en el desarrollo de la contienda. La intimidatoria verticalidad de las gradas, sumada a la interpretación del juego por parte del público para ‘apretar’ en la presión y minar la moral de los rivales tras cada error. Y es que el dicho de que Mestalla es el jugador Nº12 se escapa prácticamente de lo figurado para rozar el plano de lo literal. La unión hace la fuerza y esta plantilla tiene el respaldo de una hinchada que reconoce su honradez sobre el campo y que está dispuesta a arrimar el hombro para superar una coyuntura marcada por las adversidades. La afición es el mayor activo que posee el club , que debe de cuidarla como se merece. También gana partidos.