Mestalla vuela alto con Gattuso

El equipo recupera sus señas de identidad, se demuestra así mismo que la derrota en Vallecas fue un accidente y se marcha al parón liguero con la confianza de estar en el buen camino

Castillejo celebrando su gol ante el Celta

Castillejo celebrando su gol ante el Celta / JM Lopez

Andrés García

Andrés García

Mestalla se lo pasó en grande. Otra vez disfrutó de lo lindo. Como en la apoteósica noche del Getafe. El viejo coliseo fue una auténtica fiesta. Ocho goles en los dos últimos partidos en casa. Hay que remontarse cinco años atrás para encontrar algo igual. El partido acabó como no podía ser de otra manera con una atronadora ovación al equipo y con los dos fondos del estadio saludándose entre ellos.

Como en los viejos tiempos. Hubo goles, fútbol y un sentimiento de orgullo hacia un entrenador y unos jugadores que han devuelto la ilusión a la afición. La conexión es máxima. Hay mucho ‘feeling’. Y eso es sinónimo de éxito en Mestalla. La grada se identifica con este Valencia de Gennaro Gattuso.

El equipo de Rino juega, divierte, transmite, compite y, lo más importante, gana. El equipo recuperó sus señas de identidad perdidas en Vallecas, se demostró a sí mismo que la derrota contra el Rayo Vallecano fue un accidente y se marcha al primer parón liguero con tres puntos más en el bolsillo y, con algo todavía más importante, la sensación de que sigue por el buen camino.

Mirando a la parte alta de la clasificación

El Valencia de Gattuso está muy vivo. El equipo mira hacia arriba en la tabla de clasificación y no pierde de vista la zona de Europa con la tranquilidad de que da saber que esta joven plantilla tiene mucho margen de crecimiento.

Gattuso se presentará a la reunión de Singapur con Peter Lim con un balance en LaLiga de 9 puntos sobre los 18 posibles. Un registro que hay que darlo como bueno sobre todo por la imagen que se ha ofrecido. El equipo ha competido y ha sido fiel a su estilo de juego en cinco de las seis primeras jornadas de LaLiga y eso es mucho decir. Solo hay un lunar: Vallecas. Lejos de dudas o dar vida a los viejos fantasmas del pasado, el Valencia tuvo ayer la personalidad para levantarse del batacazo de Madrid y dar un paso adelante como equipo. 

Otra de las lecturas positivas que dejó el partido es que el equipo se ha consolidado como un equipo fiable en Mestalla. Y eso son palabras mayores. El equipo ha sacado adelante tres de sus cuatro primeros partidos como local (Girona, Getafe y Celta) y se marcha al parón de selecciones con un 9 de 12 puntos que invita a la esperanza. Sin olvidar que mereció mucho más contra el Atlético de Madrid. El Valencia tiene motivos para ser optimista.

El baile al Celta demuestra que hay gol más allá de Edinson Cavani. No hizo falta la definición del uruguayo. El Valencia ganó con tantos de Castillejo, Marcos André y André Almeida. El Matador acusó la falta de ritmo y la ausencia de balones con ventaja, pero dejó su sello de jugador de calidad y de muchos galones. Solo hay que ver cómo tiró del equipo y cómo protestó algunas acciones al árbitro.

El charrúa va a ayudar mucho a los jóvenes. Es mucho más que goles. Este sábado se empezó a demostrar. Y mientras tanto, los fichajes se van sumando al carro. Cada vez se sienten más cómodos para explotar todo su potencial. Que lo tienen. Mestalla es feliz. Dos semanas sin ver al equipo parecen mucho tiempo. No hay mejor señal que esa.