Baraja necesita más de la unidad B

Los suplentes están obligados a dar un paso adelante contra el Arosa para engancharse y sumar al equipo. Los fichajes Amallah, Yaremchuk y Canós están aportando poco

Amallah y Diakhaby, ante el Girona

Amallah y Diakhaby, ante el Girona / EFE

Andrés García

Andrés García

Lo mejor que le ha podido pasar al Valencia después de la derrota de Girona es que haya partido mañana. El choque de Copa del Rey contra el Arosa, más allá del billete para los dieciseisavos de final, tiene que servir para recuperar jugadores a todos los niveles. Para que los titulares con acumulación de minutos respiren, para que los futbolistas que salen de lesiones cojan ritmo de competición y, lo más importante, para que los menos habituales den un paso adelante para engancharse y sumar al equipo. Los suplentes están obligados a subir el nivel y aprovechar el partido de Copa. Aunque sea un rival de Tercera RFEF. Rubén Baraja necesita más de la unidad B. La derrota de Montilivi en los minutos finales lo confirmó una vez más. Y ya van demasiadas esta temporada. 

El Valencia aguantó en Girona hasta que le duró la gasolina a los titulares. Míchel mejoró el equipo con los cambios. Baraja no tuvo esa suerte. En el banquillo tiene un problema gordo. Primero y más importante, por la confección negligente de esta plantilla peligrosamente corta. Segundo, por el bajo nivel de rendimiento de los jugadores menos habituales. El Valencia no tiene prácticamente plan B y el poco que tiene no funciona. Hay futbolistas obligados a dar un paso al frente y aprovechar el partido contra el Arosa en clave Liga. Es el caso de los fichajes Selim Amallah, Roman Yaremchuk y Sergi Canós por ejemplo. Los tres, suplentes en Montilivi, no están ofreciendo el nivel esperado. Ninguno está respondiendo a las expectativas. Solo Pepelu cumple con nota asentado en la columna vertebral del equipo. El equipo necesita más de ellos. Amallah no ha conseguido hacerse fuerte en el centro del campo del Pipo. Ni siquiera con la lesión de André Almeida. Yaremchuk sigue con su contador de goles a cero. Aunque aún más preocupante en su desconexión del juego del equipo. Sergi Canós no está al cien por cien físicamente y continúa lejos de su versión Premier del Brentford. Hugo Guillamón, sin minutos en Girona, tiene otra oportunidad para reivindicarse y al menos ganar posiciones en la rotación. El de l’Eliana se ha convertido en la última opción de Baraja para su centro del campo: nunca ha sido titular en LaLiga esta temporada.

Hugo Guillamón, durante un partido del Valencia

Hugo Guillamón, durante un partido del Valencia / Agencias / EFE

Diakhaby, Jesús y Marí

El partido de mañana contra el Arosa también será importante en clave enfermería. La Copa es el escenario perfecto para rodar a los futbolistas que salen de lesión como Mouctar Diakhaby, Jesús Vázquez y Alberto Marí. El joven delantero se encuentra en la última fase de su proceso de recuperación y la idea es que entre en la lista de convocados por primera vez desde que se lesionó de gravedad en verano en su recto femoral del cuádriceps derecho. El contexto de Copa también es perfecto para que Jesús coja ritmo de competición. El sábado ya dispuso de sus primeros minutos en el lateral izquierdo sustituyendo a Yarek Gasiorowski en el 89. El plan del cuerpo técnico es que arranque como titular contra el Arosa. Otro de los futbolistas que necesita rodaje es Diakhaby recuperado de la lesión de la musculatura isquiotibial de su pierna izquierda que le ha mantenido apartado de los terrenos de juego dos meses. La Copa tiene valor en clave Liga. Está prohibido desaprovecharla. 

Yarek Gasiorowski, en el centro de la imagen, al lado de los centrales Cristhian Mosquera y Gabriel Paulista

Yarek Gasiorowski, en el centro de la imagen, al lado de los centrales Cristhian Mosquera y Gabriel Paulista / LaLiga