Hugo Guillamón vuelve para quedarse

Por su cabeza nunca pasó salir del Valencia. Ni en verano ni en invierno.

No ha bajado los brazos para intentar darle la vuelta a un 2023 maldito: el año más difícil de su carrera 

Guillamón

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Andrés García

Andrés García

Hugo Guillamón espera que lo que consiguió contra el Barcelona en Mestalla sea más que un gol. El de l’Eliana confía en que su actuación del sábado se convierta en el punto de inflexión de su temporada. Es el giro radical que necesita para darle la vuelta a un 2023 que desgraciadamente siempre recordará como uno de los años más difíciles de su carrera deportiva. Hugo ha vuelto para quedarse. En el once titular de Rubén Baraja y en el club donde siempre quiso estar. En las buenas y en las malas. 

Un año da para mucho. Y si no que se lo preguntan a Hugo. El centrocampista renovó con el Valencia a finales de 2022 y se marchó con la selección española al Mundial de Catar convertido en una de las banderas del club junto al capitán José Luis Gayà. Había alcanzado la cúspide de su carrera. Por desgracia todo cambió para mal. Sin minutos con Luis Enrique en la Copa del Mundo, desaparecido de las prelistas de Luis de la Fuente y perdiendo protagonismo en el Valencia primero con Gennaro Gattuso y luego con Baraja. Solo disputó 7 minutos en las últimas diez jornadas de liga la temporada pasada coincidiendo con la irrupción de Javi Guerra en el primer equipo.

La explosión del canterano y el fichaje de Pepelu planteó la posibilidad de una salida en el mercado de verano. El Athletic llamó a su puerta. Sin embargo, Baraja tuvo miedo a quedarse sin centrocampistas y, lo más importante, por la cabeza del jugador nunca pasó salir del club. Su apuesta fue quedarse y luchar para ganarse la confianza del Pipo. 

Nada cambió para Hugo esta temporada. Hasta el sábado nunca había sido titular en Liga. Solo jugó de inicio en Copa contra el Logroñés y el Arosa. Acumulaba 17 suplencias consecutivas. Todas las jornadas. Contra el Getafe y el Girona recientemente ni siquiera jugó fuera de la rotación del entrenador. La baja por sanción de Javi Guerra por su expulsión en el Coliseum le abrió las puertas de la titularidad en liga esta temporada. Era el mejor escenario para dar un paso adelante.

Y Hugo lo hizo. El futbolista aprovechó la oportunidad contra el Barcelona, recuperó el protagonismo perdido y salió muy reforzado en clave futuro a corto plazo cerrando todas las puertas de una posible salida en el mercado de invierno. El único objetivo de Guillamón es volver a ser importante para el equipo. De momento, la idea de Baraja es que repita titularidad el martes contra el Rayo. El Pipo valora la actitud con la que Hugo ha afrontado estos meses duros y está dispuesto a sacarle el máximo rendimiento. «Me pone muy contento que no haya bajado los brazos cuando no jugaba tanto».

Lo que le estaba pasando a Hugo no es normal. El futbolista siempre fue experto en sobreponerse a las adversidades y remar a contracorriente. Como cuando le sentaron dos meses en el filial, cuando el club le dejó sin contrato con Celades en plena pandemia, cuando Javi Gracia le colgó el cartel de quinto central o cuando Peter Lim jugó torpemente con su renovación. Hugo está obligado a otro ejercicio de superación. Lo necesita más que nunca. 

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