Abocados a un partido muy ajustado

El Valencia visita hoy a uno de los equipos en peor forma del campeonato. 15 partidos lleva sin ganar y aunque mantiene la solidez defensiva como una de sus credenciales para luchar por la salvación -lleva cerca de la mitad de goles encajados que los otros dos equipos en descenso-, a nivel ofensivo es una fuente totalmente seca. El encuentro, en el Nuevo Mirandilla, se prevé ajustado y que se decidirá por la diferencia de pegada que a día de hoy da cierta ventaja a los de Rubén Baraja, que llevan seis tantos más en su casillero.

En términos estilísticos, ninguno de los dos combinados se siente cómodo llevando la iniciativa y prefieren asumir el rol de contragolpeador, una postura muy radicalizada por parte de los gaditanos, cuya posesión media no alcanza ni el 40 por cien por partido. Los de Rubén Baraja deberán mostrar su cara más inspirada a nivel asociativo porque todo hace indicar que tendrá más balón que lo habitual. 

La importancia de la pegada

El encuentro medirá a los dos combinados que menos disparan de toda LaLiga, por lo que la efectividad cobra un valor fundamental. Más en el caso del Valencia, que es defensivamente más fuerte y que puede sacarle mucho partido a cada gol. Defender bien el balón parado cadista, con el que marca más de un tercio de sus goles, será fundamental en el terreno defensivo. En ataque, mientras tanto, el estado de forma de Sergi Canós es una de las principales credenciales ofensivas de un equipo que no podrá contar con Yaremchuk, pero sí con Hugo Duro, por lo que lo más probable que Baraja vuelva a alinear un solo punta y la duda está entre Diego López unos metros por detrás o Javi Guerra como mediapunta de talante asociativo, una decisión que marcará el tipo de planteamiento que pretende el Pipo. 

Amenaza lateral

Para desarmar al Cádiz una de las grandes claves estará en generar espacios en una defensa que actúa con las líneas compactas y encontrar la amplitud será clave. Para ello Baraja contará de nuevo con sus dos laterales titulares: Thierry Rendall y José Luis Gayà. Y es que la mejor versión del equipo ha llegado cuando han estado los dos por la capacidad para encontrar la superioridad numérica y la profundidad en sus acciones. El de Pedreguer, sin ir más lejos, ha estado implicado en los últimos cinco goles del equipo, el mayor reflejo de la incidencia que están teniendo en los planteamientos del equipo.