SUPER pregunta por el sentir de la afición

SUPER pregunta a la afición: "O Peter Lim se va o el Nou Mestalla no tiene solución"

Los vecinos de la Avenida de las Cortes Valencianas y aficionados del Valencia CF valoran y opinan sobre cuál debería ser la hoja de ruta con el estadio en ruinas de ahora en adelante

SUPER pregunta a la afición: "O Peter Lim se va o el Nou Mestalla no tiene solución"

JM López

Rafa Jarque

Rafa Jarque

Camino de las dos décadas con un esqueleto arquitectónico ensuciando la que es una de las mejores ciudades de toda Europa, los valencianistas y valencianos empiezan a quedarse sin argumentos para definir uno de los mayores bochornos de Valencia en el siglo XXI. Un oscuro capítulo que lleva el nombre de Peter Lim en la casilla de ‘autor’ y muchas veces al Ayuntamiento, queriendo o no, como su principal cómplice en la incomprensible misión de que el Nou Mestalla lleve paralizado 15 años. Ni el paso del tiempo, ni la caducidad de la Administración Territorial Estratégica (la famosa ATE), ni los cambios de gobierno a derecha o a izquierda, ni el Mundial 2030... nada ni nadie ha conseguido hasta el momento desbloquear una situación que a quien verdaderamente afecta es a los ciudadanos y a los aficionados del club.

Se suceden los capítulos pero sin ningún mínimo avance ni atisbo de él, como una serie mala de televisión. De hecho el Valencia se ancló en la ATE, encargada de agilizar las tramitaciones de grandes proyectos de inversión en la Comunitat Valenciana, pero que conllevaba unos plazos que la entidad no cumplió y por eso fue declarada su caducidad. A pesar del recurso presentado por el Valencia mostrando su desacuerdo, el TSJ denegó la prórroga solicitada, confirmando así su punto y final. Ese escenario debía dar pie a la redacción y firma de un nuevo convenio que recogiera las condiciones de obra, así como la aprobación de las fichas urbanísticas, pero Meriton nunca sacó el coche del ‘punto muerto’. El Ayuntamiento exigía y sigue exigiendo al club las licencias de obra antes de firmar el nuevo documento mientras que el Valencia echa balones fuera y exige el convenio.

Nada cambia y a corto plazo no lo va a hacer. Los vecinos de la Avenida de las Cortes Valencianas seguirán sufriendo a la vista durante mucho tiempo todavía las consecuencias de una gestión deficiente. SUPER ha salido a la calle precisamente para conocer el sentir de los que más lo sufren, los valencianistas de corazón. «Esto ya tiene muchos años en estas condiciones y la solución es que se vaya Peter Lim, el dueño», exclama Nicolás Herráiz, vecino de la zona, que además recuerda que el Valencia «es de los socios» y son ellos «los que lo tienen que tener (el estadio)». Más allá del asunto urbanístico, Nicolás mostró su dolor por el trato que está recibiendo el club de sus amores y reiteró la idea de que el club es de los socios: «Lo importante es el equipo. El Valencia se merece muchísimo más, es un equipo con una solera muy importante. Yo soy socio y esto uno lo siente. Lo importante sería dejar en manos de los socios el club. Que se vaya, que solo trae ruina, cada año hay que pulir a cuatro o cinco jugadores que se van. Lo importante es que el equipo pertenezca a los socios».

La misma línea sigue David, que habla en nombre de todo el valencianismo: «O Lim se va o aquí no hay solución», asegura antes de exigir algo más de responsabilidad y contundencia a las autoridades: «El Ayuntamiento debe exigir que acabe el estadio y que tenga un proyecto deportivo para el Valencia». Y es que Meriton no son los únicos que están poniendo a prueba la paciencia de la gente: «El Ayuntamiento tendrá que hacer lo mejor para los intereses de la gente. Quien quiera ganar dinero que se esfuerce. No va a haber repercusión para los demás. El que tenga interés que lo ponga en marcha y se pongan de acuerdo que al final parece que nos tomen por tontos», exclamó Alberto, otro aficionado.

De emblema a «buñuelo»

El Nou Mestalla fue presentado en su momento como una obra que se convertiría en un emblema para la ciudad. El devenir de los acontecimientos deportivos le podría dar su primera gran cita en 2030, dándole la oportunidad incluso de acoger una de las semifinales del Mundial que se celebrará en España, Portugal y Marruecos. Sin embargo, el bloqueo se ha estirado tanto que incluso la presencia de València como sede del gran torneo dentro de seis años está en duda. La FIFA ya pide informes a la RFEF de cada ciudad y cada estadio y el Valencia, por lo que sea, no puede presentar los de un estadio que no es estadio, es más bien un «buñuelo» como ha definido Enrique Pastor, valencianista y vecino de Cortes Valencianas. «No me parece de recibo que con los años que lleva Peter Lim aquí no le haya dado una solución al tema. Si tiene tanto dinero e influencia y está tan implicado debería darle una solución. Ahora hay que buscar una solución. Imagino que el Ayuntamiento debe llegar a un acuerdo con el club e intentar que este ‘buñuelo’ que tenemos en la ciudad llegue a su fin y se convierta en lo que debe ser, un estadio emblemático para la ciudad».

Las consecuencias son deportivas pero por supuesto también económicas y sociales. «Cuando yo me compré el piso supuestamente esto está proyectado para ser algo público, ya nunca más se supo, empezaron a hacer el estadio y parado está y parado se ha quedado», explica Toñi Cerro, también vecina de la zona. La misma línea sigue Lorena, que afirma que tiene que salir adelante «como sea». De hecho, en las primeras presentaciones de proyecto del Nou Mestalla, la obra se mostró a los ciudadanos además como una oportunidad fantástica de crear puestos de trabajo, puesto que una construcción tan importante trae implícita otras aperturas y, por ende, otros negocios asociados o no que hubieran generado empleo. 15 años más tarde, nada de eso se está cumpliendo. Otro aficionado como Miguel, además, vuelve a señalar a Peter Lim y recuerda que él «se comprometió a terminarlo» y por eso debe hacerlo. Ya fuera de tiempo, lo preocupante no es todo lo vivido, que también, sino que no existe una hoja de ruta clara, no se ve la luz al final del túnel ni existe el mapa para encontrarla. El Valencia parece perdido en un laberinto cuya salida ahora es casi imposible de imaginar.