El nuevo Valencia se está cociendo a fuego lento. Bajo una aparente quietud, generada en parte por la situación de bloqueo económico que atenaza cada uno de los avances de García Pitarch a la espera de que se acelere la operación salida, el club de Mestalla avanza en la planificación de una temporada a la que acudirá con saldo negativo. El conjunto de Ayestaran tiene mucho que demostrar después de firmar la cuarta temporada más triste de su historia y el club prepara una transición competitiva cimentada en torno a una limpieza de vestuario, la regeneración del tejido competitivo y de los valores clásicos del valencianismo y, por supuesto, futbolistas que estén a la altura del escudo que defienden. La hoja de ruta es clara. Los planes están marcados. Las carencias se han detectado y se han puesto sobre la mesa.

Pese a que no ha habido movimientos significativos, los futbolistas que están en la rampa de salida lo saben desde hace un mes. Y los que están en el radar también lo saben. El Valencia ha trasladado oficialmente el interés por Albiol, Gustavo Gómez, Diawara, Ignacio Camacho y Kostic. Son los futbolistas que están en la agenda, además de un delantero. Habrá fichajes en todas las líneas. Así se construye el nuevo Valencia.

Suso García Pitarch y Pako Ayestaran convienen la necesidad de reforzar la defensa con dos centrales. Abdennour y Aderllan Santos están marcados con la cruz, no tienen sitio en el conjunto de Mestalla después de que su rendimiento no estuviera a la altura de las expectativas deportivas y económicas.

Mustafi, por su parte, se ha mostrado a Europa con un cabezazo que tumbó a Ucrania y en el club se frotan las manos con la esperanza de que se revalorice en la Eurocopa y logre inflamar las cifras de un hipotético traspaso. Con ese panorama, Vezo quedaría de contrapeso y se trabaja con la intención de que la pareja titular la próxima temporada esté formada por Albiol y Gustavo Gómez. Se acabaron los riesgos. La locura no favorece al Valencia. Suso y Pako ponderan la experiencia y el liderazgo del valenciano con la agresividad y la contundencia del paraguayo para estabilizar la línea más problemática del curso pasado. A priori, y a falta de una adaptación que se le supone a Albiol por arraigo y que se le intuye a Gómez por trayectoria y progresión, la zaga volverá a ser un entramado de fiabilidad esta temporada que viene.

García Pitarch trabaja por lo tanto en dos fichajes para la defensa. Con la portería más que cubierta -se escuchan propuestas por Alves y se va a mejorar y extender el contrato de Jaume Domènech-, el siguiente objetivo es el centro del campo. Los responsables de la parcela deportiva han hablado con Parejo y quieren que sea un hombre importante. Lo mismo sucede con Javi Fuego, al que confieren una misión de capitán como es inculcar el compromiso y una cultura competitiva a tiempo completo entre sus compañeros. André está en una situación similar a Mustafi. Y a partir de ahí se trabaja en el fichaje de Ignacio Camacho, capitán general del Málaga en las últimas tres temporadas, si bien su llegada ha estado parada durante semanas hasta que Suso se citó con el Málaga en Castalia, tal y como desveló SUPER, y a día de hoy se antoja complicada en términos económicos. La alternativa número uno es Amadou Diawara, la joya del Bolonia, por el que suspiran equipos como el Nápoles o la Roma. Sus representantes ya estuvieron en Mestalla, convence por poderío físico y recorrido y el Valencia negocia con el club italiano para bajar de 15 millones.

Así juega Amadou Diawara

Así juega Amadou Diawara

La situación de Diawara está caliente. El Valencia está en reuniones con los directivos del Bolonia, que están dispuestos a vender al futbolista pero siempre asegurándose un buen pellizco porque el montante que saquen marcará la línea de su planificación deportiva. De forma paralela se presenta el affaire Danilo.

El brasileño ha ido de menos a más esta pasada temporada y ha dado pinceladas de su enorme potencial a futuro. El contexto no le acompaña. Él quiere seguir. El Valencia lo quiere, pero gratis. No quieren pagar por su traspaso. Suso está tratando de aflojar el nudo que bloquea los fichajes y es reacio a gastarse dinero en el medio brasileño, que por otra parte, necesita jugar y la presencia de Ayestaran no le favorece, pues no le mostró precisamente su confianza este curso. Además, está el caso de Enzo Pérez, por el que el club abona algo más de 8 millones de euros al Benfica en concepto del último pago por su traspaso. El argentino, al que en el Valencia señalan como uno de los responsables de los ´liderazgos tóxicos´, tampoco tiene cabida y se escucharán ofertas por él. Su salida podría abrir la puerta a otro medio.

Así juega Filip Kostic

Así juega Filip Kostic

Descarte de un club ´top´

El extremo elegido, ante la imposibilidad de fichar a Cheryshev, es Kostic. El serbio espera que el Valencia acelere la operación, que se resuelve en las diferencias económicas con el Stuttgart. Le gusta el equipo, la ciudad y el proyecto. Ya estuvo su hermano y dio luz verde. El acuerdo con el jugador es un hecho. En cuanto se produzca una salida podría adquirir una nueva velocidad su fichaje. Negredo deberá salir. Y en su lugar se busca delantero, si bien es una operación de final de verano y que puede llegar de un descarte de un club ´top´. Ahora el foco está en la Eurocopa, donde se encuentra ahora mismo Suso.