Geoffrey Kondogbia ya está en territorio africano. La experiencia va a ser muy potente, tremenda a todos los niveles. El centrocampista conoce la realidad de República Centroafricana, en verano pasó parte de sus vacaciones allí y tiene una fundación enfocada a aliviar algunos de sus problemas. La decisión es mucho más que fútbol. Kondogbia va a hacer visible un país normalmente olvidado, uno de los más pobres del mundo. El paso le va a convertir en ídolo y referencia. Su primera parada será Bouaké (Costa de Marfil), después le tocará competir en Ruanda, por ejemplo. Hace un mes no pudo debutar ante Guinea por una lesión en el tobillo, pero el momento llegará el viernes, ante ´Los Elefantes´. La intención de representar al país de sus progenitores lleva en su cabeza desde hace mucho tiempo y explotó definitivamente después de que Didier Deschamps -pese a su gran temporada- le dejase fuera de la lista para el Mundial de Rusia. Siempre se ha sentido francés, con Les Bleus fue internacional y conquistó una Copa del Mundo Sub-20, pero la madurez ha reforzado su sensibilidad africana y ha subrayado la fuerza de algunos proyectos vitales.

Referencia en un grupo con una docena de futbolistas amateurs

Un sueño -ganar un Mundial para Francia- por otro sueño, clasificar para una gran competición a República Centroafricana. Compromiso y reto, el equipo nacional de ´Los Grandes Felinos´ ocupa el puesto 111 en el ranking FIFA y nunca ha estado en un Mundial o una Copa Africana de Naciones, el objetivo por el que pelea es jugar la fase final de la CAN 2019, que se celebrará en Camerún, entre junio y julio. La realidad es que tiene difícil batir a Guinea o Costa de Marfil, a la que se mide en un doble duelo definitivo. Son dos equipos de alto nivel. Kondo tendrá que liderar un bloque armado con cerca de una decena de futbolistas amateurs. Cédric Yambéré (Dijon), Amos Youga (Le-Havre), Foxi Kéthévoama (Balikesirsport) o Frédéric Nimani (Neuchatel) son de los pocos nombres reconocibles o con cierta trayectoria. Hay cuatro jugadores sin equipo (entre ellos, el portero titular y uno de los defensas, Éloge Enza-Yamissi), el resto anda repartido por Marruecos, Malasia, Irak, Camerún, Kazajistán, Moldavia o la cuarta división francesa. El equipo que dirige Raoul Savoy arrancó la clasificación con triunfo ante Ruanda, después perdió en Guinea... Kondogbia busca un auténtico milagro. Es el sueño de un país entero.