En junio de 2012 Mauricio Pellegrino se convirtió en el elegido de Manuel Llorente para comenzar de cero la etapa pos-Emery en el Valencia CF. Llorente, movido por su apuesta personal por un hombre cargado de conocimiento pero sin experiencia como primer técnico más allá de la escuela, desatendió el consejo de la dirección deportiva, que tenía encauzado el fichaje de Luis García. Medio año después, el 1 de diciembre, Llorente despidió al argentino. Fue la principal consecuencia de la goleada sufrida contra la Real Sociedad con el clásico «vete, ya». El peso de un vestuario con futbolistas conviviendo en escasa armonía, como Gago, Banega, Soldado, Albelda o Diego Alves, pudo con el entonces inexperto Pellegrino antes de pasar a las manos de Voro y Ernesto Valverde.
Aquellos duros meses comenzaron a curtir al Pellegrino de hoy, un hombre que se ha labrado una carrera en los banquillos levantándose ante los golpes inherentes a la profesión más difícil en el mundo del fútbol. La de entrenador. El 'Flaco', como era conocido en sus años de defensa central, ha regresado a la liga española de la mano del CD Leganés. El próximo sábado se enfrentará como técnico por tercera vez al Valencia CF. Fiel a su instinto de supervivencia, Pellegrino ha resucitado al conjunto 'pepinero' después de un inicio complicado en el que empezaba a ser cuestionado con un solo punto en los cinco primeros partidos. El Valencia, sin embargo, deberá tener activadas todas las alarmas, ya que el Leganés encadena tres partidos exhibiendo solidez y carácter competitivo. El 'Lega' ganó al Barça con goles de El Zhar y Óscar, resistió en el Villamarín hasta el gol bético de Loren en el último minuto (1-0) y se impuso por la mínima al Rayo en casa.
En abril de 2013 Estudiantes de la Plata contrató a Pellegrino como sustituto de Diego Cagna. El reto era complicado en un histórico argentino que venía de un pasado reciente de gloria bajo la batuta del 'Cholo' Simeone. La labor del exjugador de Leones fue más que digna al frente de 'El Pincha'. Cuando dos años más tarde la dirigencia decidió separar los caminos, Pellegrino había dejado para el futuro una interesante camada de jóvenes: Rulli, Joaquín Correa, el 'rusito' Ascacíbar y dos más con los que hoy está en el Leganés, Jonathan Silva.
Billete de vuelta a la Liga
La aventura con Estudiantes concluyó de modo tormentoso, casi injusto con sus resultados. Pero en junio de 2015 otro clásico en Argentina, Independiente, volvió a darle una oportunidad. Y la aprovechó firmando el mejor arranque de la historia del club, seis victorias en los seis primeros partidos. A pesar de los buenos momentos, concentrados en las victorias frente a Racing o River, la dirección del 'Rojo' de Avellaneda decidió no renovarle al no haber conseguido el objetivo de clasificarse para la Copa Libertadores. «Es un momento difícil, tenía la ilusión de lograr que Independiente gane un campeonato», lamentó el 'Flaco'.
Más de allá de sus salidas traumáticas, Pellegrino se creó un nombre como entrenador en su país... y un billete de vuelta a la liga española. Al año siguiente el Deportivo Alavés, equipo del que también defendió la camiseta al final de su etapa como futbolista, le abrió las puertas. En Vitoria el argentino demostró como la experiencia le había hecho mejor técnico del que se encontró la manija del Valencia en un momento equivocado. Prematuro. Los de Mendizorrotza alcanzaron en la temporada 16/17 los 55 puntos para quedar novenos y el míster los condujo a su primera final copera de la historia. Esta vez fue él quien dijo que no a una propuesta para continuar. La Premier, en concreto el Southampton, le hizo una oferta difícil de rechazar.
En Inglaterra sufrió en un club que pensó en él para tratar de imitar un modelo como el de Pochettino, aunque con muchos menos recursos que su compatriota. En riesgo de descenso, los Saints prescindieron de Pellegrino en la jornada 30. Otra vez una liga top europea se le había cerrado hasta la aparición del Leganés el pasado verano. La misión, siempre complicada para el 'Flaco', consiste en superar las sombras de un Garitano que voló a la GaritanoReal Sociedad después de ascender al equipo y mantenerlo dos años en la élite de Primera. Sin piezas básicas que emigraron, como Gabriel o Diego Rico, el ex del Valencia necesita tiempo. Fiel seguidor de Benítez, Bielsa o Van Gaal, Pellegrino ha iniciado una reconstrucción empezando por la defensa. Algo así como Marcelino en este Valencia 18/19.
