Junto a un Santi Mina mostrando heridas de guerra (la dureza de los jugadores del Young Boys se hizo notar) y un Jaume siempre fiel a su rol, posaba sonriente Dani Parejo en las escaleras del vestuario una vez terminado el partido. Con esta foto ilustró un mensaje de apoyo a la unidad del equipo: "Grandísimo trabajo de todo el equipo para lograr una victoria muy importante... ¡Siempre juntos, en las buenas y en las malas!".