El Valencia CF tiene un problema con Ferran Torres y cuanto antes trate de atajarlo mejor porque evitará que siga creciendo. Y cuanto más crezca el problema, más complicada es la solución. Estamos ante un futbolista que quema fases a una velocidad de vértigo. Si hace unos meses parecía una indecencia compararlo con Vicente Rodríguez, hoy hablamos de uno y de otro con una facilidad pasmosa, y es así porque el propio Ferran ha hecho posible que ahora veamos con normalidad lo que antes era una exageración. Está por ver si uno llegará al nivel del otro hasta que se lesionó, pero el tema de fondo es que hemos perdido el miedo a compararlos. Y eso son palabras mayores. Ferran ya es titular indiscutible y de Vicente dijo Héctor Cúper que cuando lo vio pensó que iba a ser un futbolista que en un par de años sería muy interesante pero a los dos meses ya era titular por delante de un tal Kily González. Vicente venía del Levante de Segunda División, pero también quemaba fases a velocidad de vértigo.

Futbolísticamente los dos son extremos aunque hay matices que los diferencian. Ferran es más de ir al espacio y galopar con metros por delante mientras Vicentín también era capaz de driblar defensas en una baldosa, pero, eso sí, se parecen en lo más importante: ambos son retadores y entienden el fútbol como un duelo entre ellos y el rival que tienen delante. Y ojo que estos retadores son los futbolistas imprescindibles y por lo tanto terminan siendo los más caros, al margen de los que meten los goles, lógicamente. Tengamos en cuenta que por mucha táctica o estrategia que monten los entrenadores, que la montan y algunos casi de manera obsesiva como por ejemplo Guardiola, llega un momento en que la jugada que se ha cocinado desde atrás de manera colectiva, termina en un individuo, termina en un futbolista que tiene regatearse a alguien, o dar un pase entre líneas. Hay un momento en el que alguien tiene que superar un rival para generar un espacio o una superioridad, por eso los retadores son tan importantes.

Pero desde el punto de vista económico Ferran también ha quemado fases a velocidad de vértigo. Si nos dicen hace unos meses que el Valencia CF le hace una oferta de renovación de contrato a Ferran y lo pone al nivel económico de futbolistas como Carlos Soler o José Luis Gayà, posiblemente a todos nos habría parecido perfecto. Ofrecer a Ferran un contrato que podemos calificar de 'segundo escalón' en la plantilla del Valencia CF parecía coherente. Ahora no lo parece. Ferran nos ha vuelto a obligar a que cambiemos de opinión. Es un futbolista que ha de estar en el primer escalón porque su rendimiento es de primer escalón. ¿Por qué no puede ganar el mismo dinero que, por ejemplo, Rodrigo? Es verdad que en todo vestuario hay un ecosistema económico que conviene tener en cuenta porque romperlo puede llegar a afectar al rendimiento del equipo en los casos en que generas desigualdades, y recientemente tenemos el caso de Batshuayi, que además de que ganaba más dinero estaba por encima del peso y no formaba parte de los poderes fácticos que dominaban lo que se cuece de puertas para adentro. Eso, y lo más importante de todo, que en el campo no rendía. Conclusión, duró unos meses. Marcelino detectó que sacar al belga era la solución y no se cortó un pelo. Salió Batshuayi, el vestuario se reordenó y el equipo poco a poco fue superando obstáculos hasta ganar la Copa del Rey. Pero no es el caso de Ferran. Pagarle a Ferran como al que más no desordena nada porque los primeros que saben que es el mejor del equipo -en estos momentos- y el que más proyección tiene, son los jugadores del Valencia CF. Ellos se miden con Ferran en cada entrenamiento, ellos saben perfectamente que les ayuda a ganar partidos. Ellos son los que se la daban a Ferran para ganarle al Atlético de Madrid. Pagarle a Batshuayi más que a otros que la temporada anterior tiraron del carro y daban la cara en cada partido rompió la armonía del vestuario, pero darle a Ferran lo mismo que a Rodrigo no rompe nada porque los vestuarios se rigen por leyes de rendimiento muy claras: los buenos ganan más. Eso los futbolistas lo entienden a la perfección. Para que se entienda tomemos el ejemplo de Isco. El vestuario del primer equipo empezó a respetarlo cuando se asentó y les hacía caños a todos: «Este es bueno, ya es uno de los nuestros». No hablo de darle a Ferran lo que pida porque aquí cada una de las partes utiliza sus herramientas, digo de pagarle como a los que más. Es evidente que el Valencia CF no le puede pagar a Ferran, o a cualquier otro, lo mismo que le pueden pagar equipos que son mucho más poderosos en lo económico, pero puede hacer todo lo que pueda. Si el Valencia CF hace eso, si le ofrece el primer escalón, mediatiza la decisión de Ferran, será él quien no quiera renovar y permitirá al club decir aquello de 'qui fa lo que pot no està obligat a mes'.

Dicho lo anterior, entiendo que en el Valencia CF vea inicialmente con cierta reticencia eso de poner a Ferran en el primer escalón económico de la plantilla, pero las situaciones hay que afrontarlas desde la realidad y no dese la 'idealidad'. Ferran debería haber renovado hace un año pero no se hizo, y ahora es un problema que, desde el punto de vista económico, hay que afrontar con realismo. Lo demás no sirve. Ofrecer a Ferran un contrato de primer nivel posiblemente sea gastar más de lo que el club tenía previsto, pero dado el rendimiento del jugador, dado que termina contrato en 2021 y teniendo en cuenta su edad y a cómo está el precio de la carne de futbolista, pagarle a Ferran ahora es como contratar un seguro, es decir, no es lo que pagas ahora, es lo que te garantizas a futuro, porque con la situación contractual del futbolista, el club ni siquiera tiene el poder para venderlo. Si lo renuevas ahora, tienes el poder en una hipotética futura venta. En caso de venta este verano, Ferran tiene la potestad para elegir el club y para mediatizar la cantidad por la que se vende porque con solo esperar un poco más y quedar libre, se lleva él el traspaso. «No firmes con nadie, y cuando seas libre yo te daré diez millones de concepto de prima de traspaso».Y eso sin hablar de la ficha por cada temporada. Para poder sacar dinero por el jugador tienes que renovarlo. Si el Rafelbunyol da 50 millones por Ferran pero él prefiere jugar en el Puçol que solo ofrece 10 tienes un problema porque se espera a quedar libre, se va gratis al Puçol y a lo mejor hasta cobrando esos 10... Renovar a Ferran te garantiza que cuando vengan ofertas podrás mandar en la negociación. Y si le ofreces el tope salarial de la plantilla y no acepta... es Ferran quien decide irse a ganar más a otra parte.