Esfumada la Champions con crueldad fría y matemática, el Valencia CF por razones sanitarias más que futbolísticas. Ya no hay más por lo que luchar que por una plaza en la Europa League, torneo que podría suavizar las pérdidas económicas en el balance, siempre y cuando los blanquinegros fuesen capaces de alcanzar sus últimas instancias asegurándose alrededor de 20 millones de euros.

El golpetazo de quedarse sin sitio en la Liga de Campeones no se puede amortiguar. Sin embargo, el gol de Kang In al Valladolid, al menos, permite aferrarse a algo. Voro asumió el cargo 48 horas antes de la derrota en Mestalla contra el Athletic. El cuarto, el Sevilla, estaba a ocho puntos y el Villarreal, sexto, a cinco. La Real Sociedad, séptima, solo a uno. Un difícil escenario que obligó al de L'Alcúdia a entrar al vestuario con el propósito de reactivar la moral del grupo planteando una 'mini liga' desde cero. Pero el traspié con los leones y el empate de última hora en Granada minaron el ánimo propio mientras se alimentaba el de los rivales.

El comienzo se retrasa a septiembre y octubre

La primera victoria de la sexta etapa Voro, en cambio, ha reavivado el deseo de competir en esa 'mini liga'. Ahora de tres partidos, pendiente de otros campos y con un único objetivo posible y definido. La Europa League. «Ganar nos da tranquilidad, a ver si podemos clasificarnos para la Liga Europa... es lo máximo, y lo mínimo, que podemos hacer», señaló el técnico tras vencer al Valladolid. Lo máximo por la realidad misma, y lo mínimo por la dimensión del club. El 'premio' del séptimo lugar en la tabla significaría iniciar la Liga Europa el 17 de septiembre en su segunda ronda, a partido único. Después seguirían con el mismo formato la tercera ronda (24 de septiembre) y un play off final (1 de octubre) antes de la fase de grupos, a la que quinto y sexto de la Liga se unirán el 22 de octubre.

El hecho de que dentro de unas semanas vayan a reactivarse las competiciones europeas de este 2020, a la vez, ha provocado que se retrase a septiembre y octubre los inicios de los torneos UEFA 2020/21. Cuando el séptimo de la Liga comience la Liga Europa, la liga española ya habrá vivido su primera jornada los días 12-13 de septiembre.

Este próximo domingo en Butarque los blanquinegros probarán el calado de la reacción ante el Leganés, rival angustiado en su pelea por salir de la zona de descenso. No obstante, a pesar de la desventaja en los números, el Valencia cuenta con algún punto a favor en la carrera. Para empezar, podría darse el hecho de pujar por los nueve puntos que restan con equipos con sus objetivos prácticamente finiquitados. Si hoy el Leganés no gana al Eibar, solo una catástrofe del Alavés en los tres próximos partidos le daría un hilo de vida, algo que el Espanyol ya no tiene, sentenciado matemáticamente ya por el Barcelona. Tras la visita de los 'periquitos' en la jornada 37, el Valencia cerrará la Liga con un Sevilla que confía en llegar ese día con la cuarta plaza y la Champions en el bolsillo.

Evidentemente, el conjunto entrenado por Lopetegui es el mejor colocado de entre los nueve con opciones aún tanto de entrar como de salir de la zona de Europa League. Un solo punto en San Mamés le garantizaría su concurso europeo. De hecho, la existencia de duelos directos, como ese Athletic-Sevilla, es otro factor que juega en favor del Valencia. Getafe y Villarreal se enfrentaron este miércoles -con una polémica victoria amarilla-, y en próximas fechas la Real encadenará partidos contra Granada, Villarreal y Sevilla. Además, por ejemplo, a Villarreal y Getafe les esperan también duelos duros frente a Real Madrid y Atlético.

Lo cierto es que si la Real vuelve a despegarse este viernes ganando al Granada, la apuesta más segura para los valencianistas sería un pleno: nueve puntos de nueve. Los 'groguets' ya se han alejado demasiado y los principales rivales parece que serán tres. Por cercanía en la tabla, Real Sociedad y Athletic, y por su irregular estado de forma, nuevamente el equipo 'txuri urdin' y el Getafe. Los de Bordalás únicamente han podido ganar uno de ocho partidos tras la cuarentena. Una situación parecida vive la Real, castigados por las lesiones y el mal estado físico de hombres clave como Odegaard.