Biodiversidad

Estas son las aves que se han extinguido en España en los últimos 500 años

Doce taxones han desaparecido, entre otras causas, por la presión humana, la agricultura intensiva y el uso de productos tóxicos

Las 12 aves que se han extinguido en España en los últimos cinco siglos.

Las 12 aves que se han extinguido en España en los últimos cinco siglos. / EFE / Griselda Romero

Ramón Díaz

Ramón Díaz

Doce taxones (categorías biológicas) de aves presentes en España hasta algún momento de los últimos 500 años se consideran desaparecidos, cuatro de ellos extintos por completo, mientras que ocho están desaparecidos completamente de alguna región (regionalmente extinto), según el último ‘Libro Rojo de las Aves de España’ publicado por SEO/BirdLife.

Entre los principales motivos para la extinción figuran la alteración y la destrucción del hábitat a causa de la agricultura intensiva, el uso de productos agroganaderos tóxicos, la urbanización y la creciente presión demográfica, según la ONG conservacionista.

Asimismo, se consideran factores desencadenantes del declive la presión humana sobre los lugares de nidificación, la recolección de huevos, el coleccionismo científico o la caza excesiva. Por último, la introducción de animales depredadores o la ‘rarificación’ de las especies de las que se alimentan las aves son también elementos causales de la desaparición.

Tres ejemplares de grulla común.

Tres ejemplares de grulla común. / Pixabay

Estas son las doce especies desaparecidas o regionalmente extintas en España:

1. Ostrero negro canario (Haematopus meadewaldoi)

Habitaba en las costas arenosas y pedregosas de las Islas Canarias orientales. La primera mención escrita sobre un ejemplar en La Graciosa, data de 1820; la última, de 1913, cuando se tiene constancia del abatimiento del último ejemlplar en esa misma isla.

2. Terrera marismeña, subespecie rufescens (Alaudala rufescens rufescens)

Fue un ave común en la isla de Tenerife, y bien distribuida, hasta la segunda mitad del siglo XX, cuando comenzó a constatarse su declive poblacional. Se fragmentó la distribución entre el entorno de La Laguna, donde los censos de parejas reproductoras cayeron un 92% entre 1992 y 2002, hasta desaparecer por completo en 2003; y la mitad meridional, donde descendieron un 59,1% y cuyos últimos ejemplares se observaron en 2007.

3. Mosquitero canario, subespecie exsul (Phylloscospus canariensis exsul)

Las primeras menciones datan de 1903 en Lanzarote (aunque no se descarta que también hubiera habitado en Fuerteventura) y su distribución debía estar ya muy restringida cuando fue descubierto, limitándose a las manchas más pobladas de matorral de las zonas altas del valle de Haría. Aunque algunos registros lo sitúan en décadas de los 70 y 80, no se descarta que pudiera tratarse de confusiones con el mosquitero común.

4. Tarabilla canaria, subespecie murielae (Saxicola dacotiae murielae)

Es el taxón más efímero de la fauna canaria, que habitó en los islotes del archipiélago Chinijo (Lanzarote): en los islotes de Montaña Clara, donde se descubrió en 1913; y en Alegranza, donde fue muy abundante. Su desaparición se estima ocurrió a mediados del siglo XX.

5. Ánsar campestre (Anser fabalis)

Ave que cría en la tundra europea y del noroeste de Siberia y que debió de tener una población invernante muy numerosa en la mitad norte de España, concentrándose en la cuenca del Duero, el Bajo Aragón y norte de Toledo. Su declive en España se aceleró entre finales de los años 60 y comienzos de los 2000.

Un ejemplar de Ibis eremita en la sierra del Retín (Cádiz).

Un ejemplar de Ibis eremita en la sierra del Retín (Cádiz). / EFE / Jorge Zapata

6. Ibis eremita (Geronticus eremita)

Originalmente de distribución circunmediterránea, estuvo presente en países del arco alpino y yacimientos paleontológicos de la Península Ibérica. Se estima que desapareció en Europa en el siglo XVII. En España aún existen programas de reintroducción.

7. Grulla damisela (Grus virgo)

Existen registros subfósiles desde el año 3600 a. C., referenciada en ilustraciones desde el siglo XIII y con constancia de ejemplares capturados en Mallorca el siglo XVIII, en humedales andaluces en el siglo XIX y en zonas de Badajoz a principios del XX. La existencia de pequeños núcleos reproductores aislados en el Magreb, extinguidos en el siglo XX, parecen indicar su presencia en España hasta tiempos no muy lejanos. Se han homologado observaciones recientes en España, aunque no se descarta que se trate de aves escapadas de cautividad.

8. Grulla común (Grus grus)

Este taxón existió como ave reproductora en España entre finales del siglo XIX y mediados del XX, y tuvo tres núcleos de cría en las marismas de Doñana (Huelva), la laguna La Janda (Cádiz) y la laguna de La Nava (Palencia). Aunque dejó de reproducirse hacia los años cincuenta, aún a día de hoy siguen llegando grandes contingentes durante el invierno.

Torillo andaluz.

Torillo andaluz. / Francesco Veronesi

9. Torillo andaluz (Turnix sylvaticus)

Ocupaba zonas del Mediterráneo occidental hasta que en el siglo XX sufrió una dramática reducción. En España, la población estaba restringida a Andalucía y los últimos ejemplares, arrinconados en Doñana, datan de 1981. En la actualidad subsiste tan sólo en Marruecos y en Argelia.

10. Zarapito fino (Numenius tenuirostris)

Esta especie migratoria de larga distancia –que se desplazaba desde Siberia hasta el norte de África y Oriente Medio– fue escasa pero regular en España en época de paso y en invierno. Fue localizado en la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX en la ría de Arosa, Gallocanta, Fuentedepiedra, río Guadalhorce, albufera de Valencia y Doñana. Otras citas más recientes lo sitúan entre los años 60 y principios de los 90 en Doñana, Costa Brava, Lanzarote, Mallorca y Trafalgar, aunque sin homologación ni testimonios gráficos.

11. Halcón borní (Falco biarmicus)

Tratados de cetrería de la baja Edad Media y Edad Moderna describieron dos variedades: el feldeggi, que criaba en la franja septentrional de España, el sur de Francia y centro de Europa; y el erlangeri, del norte de África, que persistió hasta finales del siglo XIX en el sur de la Península, en las marismas del Guadalquivir. Otras menciones indican la presencia de la especie hasta bien entrado el siglo XX en diferentes áreas del litoral mediterráneo, e incluso en la actualidad, España recibe ejemplares ocasionales, no reproductores.

12. Grévol común (Tetrastes bonasia)

Presente en los Pirineos catalán y francés desde finales del siglo XVIII (aún se realizan programas de reintroducción), el grévol común volvió a registrarse intermitentemente en 1960 tras llevar décadas desaparecido, y culminó con un último hallazgo en 1992. No se descarta que el grévol común pudiera mantener algún resto vestigial de su antigua población, por lo que se señala con un interrogante a continuación de la categoría: ‘Regionalmente Extinto?’. 

‘Libro Rojo de las Aves de España’: https://seo.org/wp-content/uploads/2022/09/LIbro-Rojo-web-3_01.pdf