La misteriosa imagen viral de una ardilla: ¿disfrutando de una flor o persiguiendo un bocado?

El reconocido fotógrafo holandés Dick Van Duijn, especializado en capturar momentos en el mundo animal, ha alcanzado un éxito sin precedentes con su más reciente serie de fotografías. Van Duijn se dirigió a un parque en Viena para observar el comportamiento de las ardillas que lo habitan, y después de dos horas de paciencia y cerca de 200 instantáneas, logró capturar la imagen en cuestión.

En su perfil de Instagram, Van Duijn afirma que la ardilla está olfateando una flor amarilla. Su publicación incluye tres fotografías que ya han generado casi 45.000 "Me gusta" y más de 1.000 comentarios. En la primera imagen, se aprecia a la ardilla erguida con las patas delanteras apoyadas en los pétalos de la flor. En la segunda, la ardilla, con los ojos abiertos, sumerge su hocico en el pistilo de la flor para disfrutar de su fragancia. En la última, la ardilla sostiene con una de sus patas el tallo de la flor y apoya su cabecita en los pétalos mientras cierra los ojos, en un momento de serena contemplación.

A primera vista, esta serie de imágenes parece capturar una escena estival encantadora que resalta la delicadeza de una ardilla en su entorno. Van Duijn comentó: "Viajé a Austria especialmente para fotografiar ardillas terrestres. Fue una experiencia maravillosa y muy gratificante".

Sin embargo, no todo es lo que parece. Mientras el mundo se dejaba llevar por la belleza de la imagen, un usuario de Twitter respondió desmitificando la historia de la ardilla y la flor. Este usuario sugiere que, al hacer zoom en las fotos, lo que realmente se observa es a una ardilla que se prepara para devorar un gusano negro que se encuentra entre los pétalos de la flor, terminando por engullirlo.

Esta revelación ha generado un debate entre los usuarios de Twitter. Algunos respaldan la teoría de @Kalysis, mientras que otros cuestionan su argumento y se preguntan si el fotógrafo cobró mucho por la imagen.

Así que la incógnita persiste: ¿se trata de una ardilla disfrutando del aroma de una flor en su esplendor o persiguiendo un sabroso bocado? Y las preguntas finales: ¿qué ocurrió con la flor? ¿Terminó también en el estómago de la ardilla? ¿Y si sobrevivió, qué pensará de toda esta controversia? Estos misterios quedan abiertos para futuras investigaciones.

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