¡Locura en las redes! Osasuna nunca se rinde… y Fernando Alonso tampoco

Osasuna nunca se rinde...y Fernando Alonso tampoco. Podríamos decir que esta es una de las cosas que tienen en común el cuadro navarro y el piloto asturiano, pero no, hay alguna que otra más que se ha hecho viral en las redes en las últimas horas.

Y es que el fútbol premió la magnífica temporada de Osasuna, clasificado para la final de la Copa del Rey que se disputará el próximo 6 de mayo en La Cartuja de Sevilla, la segunda de su historia. El acrobático gol de Pablo Ibáñez en el minuto 116 de la prórroga ponía el 1-1 en San Mamés y hacía bueno el 1-0 de la ida en El Sadar ante el Athletic Club.

La locura se desataba en Pamplona y también en las redes sociales, dónde Fernando Alonso se ha convertido en claro protagonista desde que arrancó el Mundial de Fórmula 1. Y no sólo por sus hazañas en la pista, también por su influencia en otros deportistas ilustres como por ejemplo Carlos Alcaraz, gran responsable de un guiño viral desde Miami.

No es el único. En las últimas horas varias cuentas recordaron un dato que acercan aún más la historia del ovetense y el Osasuna. Y es que la última y única vez que el conjunto rojillo disputó la final de la Copa del Rey Fernando Alonso se proclamó campeón del mundo de Fórmula 1. 

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Hablamos del año 2005, cuando la perdió ante el Real Betis por 2-1. El piloto asturiano conquistaba ese año el primero de sus dos títulos con Renault, el segundo llegaría un año después, en 2006.

Conocedor de esta curiosa circunstancia, el club navarro no perdió la ocasión de hacerle un guiño a Fernando Alonso a través de su cuenta oficial de Twitter. Guiño que, cómo no podía ser de otra forma, se ha convertido en viral.

"¡Misión completada! En 2005 nos metimos en la final de Copa y, ahora, lo hemos vuelto a hacer. Es tu turno @alo_oficial", escribía el club . "¿33?", preguntaba instantes después en esta misma red social.

Fiesta en Pamplona

La fiesta que comenzó cuando el colegiado pitó el final del partido que dio el pase de Osasuna a la final de la Copa del Rey se ha prolongado hasta la madrugada en las calles de Pamplona, con la llegada del equipo a la plaza del Castillo como punto álgido de la celebración.

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Los minutos que siguieron al gol del canterano Pablo Ibáñez fueron de una emoción y tensión contenida que se desató con el final del partido, momento en el que los aplausos, gritos y cánticos de los aficionados y el lanzamiento de petardos auguraban ya el inicio de una noche de celebración.

Poco a poco, desde diferentes zonas de la capital navarra fueron llegando aficionados a la plaza del Castillo, donde se congregaron en un ambiente festivo al grito de "illa, illa, illa, nos vamos a Sevilla", acompañados de los habituales cánticos rojillos y del tradicional "Riau, riau" sanferminero.

En ese ambiente esperaron a los jugadores y equipo técnico de Osasuna que llegó de Bilbao en torno a las tres de la mañana. Con ellos se desató la locura y la fiesta siguió hasta pasadas las cuatro.

El "buen comportamiento" de los aficionados rojillos ha sido destacado por la Policía Municipal de Pamplona en esa celebración, ya que salvo algún lanzamiento aislado de alguna botella a los agentes, que fue abucheado, no se ha registrado ningún incidente, indicaron a Efe fuentes policiales.