La directiva del Saguntino pide perdón, pero niega insultos racistas

El presidente de la junta gestora, Rubén López, reconoce que "perdí los papeles" y llamó "sinvergüenza" al árbitro, pero asegura que no fue él quien dijo "eres un puto moro de mierda, te voy a matar"

El club recurrirá la sanción de 4 años de inhabilitación y 6.001 euros de multa con la declaración de un hombre que reconoce ser el autor de esas frases

Rubén López en la rueda de prensa celebrada el jueves

Rubén López en la rueda de prensa celebrada el jueves / DANIEL TORTAJADA

Rafa Herrero

El presidente de la junta gestora del Atlético Saguntino, Rubén López, ha querido dar la cara al conocerse las duras sanciones contra él y otros miembros de la entidad rojilla tras los altercados a la conclusión del encuentro del pasado sábado en Alzira.

En rueda de prensa y antes de tildar el castigo como desproporcionado, al considerarlo "el más grave de la historia del fútbol español", el directivo quiere "pedir disculpas", después de que la imagen del club "haya quedado dañada. Yo perdí los papeles cuando le pedí explicaciones al árbitro por un penalti y él me contestó con una sonrisa. En un momento desafortunado de tensión le llamé sinvergüenza y otras cosas, pero ni a él ni al asistente, a quien no me dirigí en ningún momento, les insulté de forma racista, homófoba o xenófoba".

De hecho y después de que el colegiado le identificara en el acta como el responsable de haberle dicho a uno de los asistentes: "Eres un puto moro de mierda, te voy a matar", el Saguntino presentó alegaciones con la declaración de un hombre, "que no es directivo" y se responsabiliza de esas frases. Pese a "esa prueba tan concluyente", según Rubén López, el juez único del comité de competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) le ha sancionado con cuatro años de inhabilitación para cualquier cargo en la organización del fútbol por su "participación activa o fomento de actos violentos, racistas, xenófobos e intolerantes". Este castigo incluye una multa de 6.001 euros para el club y está basado en la presunción de veracidad de la palabra del colegiado.

Informador arbitral

El también director deportivo del Saguntino reitera que, poco antes de que acabara el encuentro, "estuve hablando con el informador arbitral, para saber su opinión sobre los muchos perjuicios que creemos que venimos arrastrando. Me dijo que no le dijéramos nada al colegiado o habría sanciones, así que yo, cuando empezaron a llegar los jugadores, lo primero que hice fue llevármelos para que no hubiera repercusiones deportivas".

En ese momento es cuando los ánimos se caldearon, pero "ahí se acabó todo. Cada uno nos fuimos al vestuario y la sorpresa llegó cuando en el acta me identificaba a mí por las amenazas e insultos racistas. Asumo lo que dije y la sanción que corresponda -añade López- pero es un abuso de poder que ni siquiera se me escuche. Estoy dispuesto a hacer un careo con el árbitro para que se dé cuenta de que yo no dije esas frases".

Justicia ordinaria

El primer paso de la directiva rojilla será alegar contra la resolución del comité de competición, con la principal baza de la declaración del hombre que asume los insultos y amenazas. Más allá y si no se reconocen los hechos tal como fueron "estamos dispuestos a acudir a la justicia ordinaria", explica López, quien asegura sentirse "destrozado" por las repercusiones para el club, "tranquilo" por las consecuencias que finalmente puedan tener estos incidentes y "respaldado" por el club.