Desde su estreno de titular, en la jornada cinco de LaLiga, Nemanja Radoja lo había jugado todo a excepción de los últimos cinco minutos del Wanda Metropolitano y los dos primeros encuentros de Copa ante Melilla y Jaén en los que tuvo descanso. Ahora, sin embargo, lleva tres seguidos en el dique seco, tampoco estará el sábado contra el Villarreal y no tiene fecha de regreso. Casi un mes de lesión cuando en principio sólo tenía una sobrecarga.

El misterio alrededor de una dolencia que a priori no revestía gravedad ha caído como una bomba, ya que su ausencia no es una más. Como demuestran los números, para Paco López es uno de los intocables. Además ha coincidido en el tiempo tanto con un tramo clave del curso como con los contratiempos de Hernani y Melero, otros dos casos singulares en la enfermería. Sobre todo por la confusión con el portugués, que pasó de estar en la convocatoria a caerse por lesión el mismo día y después de operarse a que el entrenador desvelara que no iba a ser necesario. El tratamiento conservador, aun así, no va a quitarle los dos meses de baja.

Radoja, camino del mes ya sin jugar, acabó con molestias el partido contra el Sevilla de Copa, el pasado 21 de enero. Las pruebas médicas no revelaron ninguna lesión en primera instancia, pero aun así seguía quejándose. Sin parte oficial sobre su estado físico, la situación olía a chamusquina por tratarse de un jugador con un umbral alto de resistencia al dolor. Para el siguiente partido, ante Osasuna, entró en la convocatoria, pero terminó siendo uno de los descartes. Incapaz de entrenarse con el grupo fueron necesarias cuatro resonancias magnéticas distintas para confirmar que el problema no era una sobrecarga sino una microrotura de grado 1 en los isquiotibiales de la pierna izquierda.

El malestar de Paco López

«El proceso ha sido que él terminó con molestias en Sevilla, en las primeras pruebas no se vio nada importante. Y luego se volvió a resentir en la semana previa al Nou Camp», explicó el entrenador, que sigue sin saber cuándo podrá tenerlo a su disposición. «¿Sabes para cuando estará?», se le preguntó en vísperas de la visita del Leganés. La respuesta fue rotunda: «No, y es un jugador importante. Vamos a ir semana a semana pero no hay un plazo determinado». A nivel interno se especula con otro plazo de 15 días.