Héctor Barberá se quedó sin equipo en el Mundial de Moto2, después de que la noche del viernes el Pons Racing comunicara su rescisión de contrato "de mutuo acuerdo".

Los hechos se sucedieron desde el jueves de madrugada, cuando el piloto fue detenido por la Policía Local en un control de alcoholemia, en el que dio positivo. El viernes, en un juicio rápido, se le condenó a un año sin carné de conducir y a 22 días de servicios a la comunidad, por ser reincidente.

El piloto no participará ya en el Gran Premio de Cataluña con el Pons Racing, para el que estaba incluso sancionado con seis posiciones en parrilla tras un incidente en carrera en el pasado Gran Premio de Italia en Mugello.

Pocas horas después de que el equipo de Sito Pons anunciara que el de Dos Aguas dejaba de ser su segundo piloto, Héctor Barberá ofreció su versión a través de un comunicado que colgó en su perfil de Instagram.

Junto a una imagen en blanco con la expresión "gracias por el apoyo", Barberá expone al margen su "arrepentimiento", que en pocas horas ha sumado más de 325 comentarios y 2.900 me gusta. A contiunación, el texto íntegro colgado por el piloto valenciano, de 31 años, y subcampeón del mundo de 125 cc en 2004 y de 250 cc en 2009, con 10 victorias y 32 podios en diecisiete temporadas en el Mundial:

"Escribo esta nota para aclarar lo sucedido hace dos noches en Valencia. Imagino que todos habéis leído las informaciones periodísticas que han aparecido desde entonces. No voy a entrar demasiado en los detalles. Fui a la fiesta de cumpleaños de un buen amigo y a la salida me paró la Policía Municipal y me hizo un control de alcoholemia"."Di positivo, aunque mi actitud fue correcta en todo momento y en el propio informe policial señalaron que mi condición física era buena. Esto no me disculpa, en absoluto. Asumo mi error y acepto las consecuencias. Lo peor es lo que tiene que ver con mi familia, mis amigos y mi pareja, pero también con mi carrera profesional. A partir del próximo Valencia

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