Maurice Eckhard: «Ahora no quiero pensar en París, sólo en recuperarme»

Maurice Eckhard no se rinde, quiere estar en los Juegos Paralímpicos de París el próximo año (serían los quintos para él) aunque sabe que más que nunca, le toca luchar contra el reloj y el calendario. Una desgraciada caída sufrida el pasado 7 de diciembre le tendrá alejado del velódromo y la carretera durante varios meses: «La caída fue tonta, acababa de salir del hotel donde estaba concentrado con la selección, llevaba apenas 800 metros en bici, había llovido, estaba todo muy húmedo y en un giro de 90 grados, al doblar una esquina había un paso de cebra pintado con pintura plástica que resbalaba, frené un poco y se me fue la bici. Iba tan lento que caí a plomo y me chafé el cuello del fémur».

Eckhard tuvo que pasar por el quirófano de urgencia:«Me han operado en el hospital IMED de Valencia, fue todo muy bien, me pusieron tres tornillos. Lo bueno es que por lo menos no ha habido que poner prótesis de cadera».

Quería desquitarse de su ausencia en Tokio

En los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 se alzó con la medalla de bronce en la Contrarreloj Individual; en Río 2016 finalizó cuarto, muy cerca del podio. En Tokio 2020 no estuvo, no formó parte de la selección española. Todo hacía presagiar el fin de un ciclo para Eckhard que a sus 40 años ha participado en cuatro Juegos Paralímpicos. Pero el ciclista nacido en Barcelona y afincado en Rafelbunyol desde los 5 años volvía a brillar en 2023 proclamándose subcampeón del mundo de Scratch en Glasgow. Una plata que de nuevo le abría las puertas de los Juegos Paralímpicos de París. Ahora, ese sueño queda en suspenso, pendiente de su evolución: «No quiero pensar demasiado en París, mi prioridad es recuperarme bien. Si no voy como participante espero hacerlo como espectador», destaca Eckhard para quien esta caída supone un frenazo en su progresión:«Es una pena porque estaba en un buen ciclo, la medalla en scratch en el Mundial me había dado mucha moral y en las pruebas importantes de la Copa del Mundo, en las pruebas de CRI, aunque no estaba en el podio, estaba entre los primeros».

Se muestra optimista

Pese a todo, Eckhard mantiene su espíritu de lucha: «De ánimos estoy bastante bien pero a veces tengo bajones por estar solo en casa, sin poder hacer nada, soy una persona muy activa y estoy acostumbrado a entrenar todos los días. Pero ya lo he asumido, es algo que a los deportistas nos puede pasar, a mí nunca me había pasado tener una lesión tan grave. Tras la operación tengo que estar tres semana sin hacer nada y poco a poco empezar con la rehabilitación. Primero con ejercicios isométricos, luego rodajes suaves en rodillo... hasta que pueda volver a subir a la bici». 

El ciclista del Proyecto FER, que de momento se tiene que mover en silla de ruedas, tendrá que esperar para volver a estar al cien por cien: «Si todo va bien a finales de abril o mayo, sería muy justo, pero aún tendría alguna Copa del Mundo para buscar la clasificación para París 2024. En cualquier caso quiero ir muy poco a poco, sin prisas, que se suelde bien y volver con las máximas garantías».

Eckhard destaca todo el cariño recibido estos días:«Estoy muy agradecido del apoyo que me están dando desde el Proyecto FER, mi seleccionador, Félix García Casas, el equipo técnico de la Federación, mis compañeros como Ricardo Ten, mi entrenador, Eloy...».

Ahora Eckhard está aprovechando las Navidades para cargar pilas con la familia: «lo único bueno de lo que me ha pasado es que puedo vivir estos días con tranquilidad, comer turrón... En enero tenía una Copa del Mundo... hay que tomárselo lo mejor posible. Espero volver pronto».