Adiós a la temporada tras un último cuarto para olvidar (59-76)

La afición respondió a la llamada del equipo y La Fonteta registró la mejor entrada de la temporada con más de 7.900 aficionados en las gradas, pero no fue suficiente para ganar un partido ante el Baskonia en el que los taronja fueron arrollados en un último cuarto en el que los de Peñarroya estuvieron irreconocibles, muy erráticos en el tiro y muy blandos en defensa. Un 59-76 que pone fin a una temporada complicada desde el principio hasta el final, con lesión final de Hermannsson.

Los precedentes invitaban a ser prudentes con el factor pista tras haber perdido cada equipo sus partidos como locales. Pero los taronja llegaban con la moral por las nubes tras la victoria en el Buesa Arena y con el plus de motivación de jugar ante una afición volcada con el equipo.

Peñarroya sorprendió de inicio con dos bases (Van Rossom y Hermannsson) y tres interiores (Labeyrie, Jasiel y Tobey) en el quinteto inicial. Enoch y Jasiel intercambiaban canastas y Tobey y Hermansson, con un 2+1, respondieron al triple de Giedraitis para poner el 9-7 en el marcador.

La igualdad se mantenía en el marcador, pero la superioridad en el rebote de los locales, unido al acierto en los tiros libres de Dubljevic y a un triple de López-Arostegui, permitieron a los de Peñarroya poner tierra de por medio hasta acabar el primer cuarto 20-9. 

Costello, con un triple, recortaba diferencias en la vuelta a la pista, pero el intercambio de canastas permitía a los taronja mantener una cómoda renta, que volvió a ampliarse hasta el +11 (30-19), con el Valencia Basket aprovechando al máximo los tiros libres. 

Solo la falta de acierto en los lanzamientos de tres impedía abrir aún más brecha en el marcador, ante un Baskonia que encadenaba aciertos desde la línea de 6,75 de la mano de Enoch y Fontecchio. Los de Spahija recortaban diferencias y el susto llegaba a las gradas con la lesión de Hermannsson, quien tuvo que retirarse sin poder apoyar la pierna tras un mal apoyo de la rodilla izquierda en una acción individual..

Un jarro de agua fría que dio paso a un 2+1 de Giedraitis que puso al Baskonia a solo tres puntos antes del descanso, con 37-34 en el marcador.

El propio Juan Roig se acercaba a vestuarios para interesarse por Hermansson, Peñarroya confirmaba después que no tenía buena pinta y en ese estado de shock, el Baskonia supo prolongar su buena racha para cerrar un parcial de 2-13 al inicio del tercer cuarto, que obligó a Peñarroya a parar el partido con 39-42 en el marcador.

Jasiel, Dubljevic y Dimitrijevic, con un triple, evitaron que los nervios aparecieran en La Fonteta, pero el Baskonia volvió a reaccionar con el acierto de Costello y Baldwin para poner a los visitantes por delante (46-49).

Los taronja empezaban a fallar tiros libres en el momento más inoportuno, pero Labeyrie puso en pie La Fonteta con un triple que acercó a los locales a un punto (52-53). Una buena defensa dejó sin tiro al Baskonia y Dimitrijevic anotó sobre la bocina en acción individual para poner por delante el Valencia BC (54-53).

Último cuarto de despropósitos

Un pequeño balón de oxígeno que perdió aire en la reanudación, con Fontecchio y Baldwin poniendo tierra de por medio de nuevo (56-63). Un peligroso parcial en contra al que se sumaron los cinco errores consecutivos de Jasiel desde la línea de tiros libres, con un Baskonia que se quedaba sin Enoch por faltas, pero que aumentaba poco a poco su ventaja ante un Valencia BC falto de acierto y flojo en defensa. Fontecchio puso la puntilla con un triple a dos minutos del final (58-72). Las semifinales se escapaban y los últimos minutos fueron ya intrascendentes. Un jarro de agua fría que se suma a los de la Copa y la Eurocup. Llega la hora de los despachos a la espera de una invitación para la Euroliga.