Javi Gracia acudirá a su cita este jueves para dirigir en la ciudad deportiva el entrenamiento del equipo, así lo confirmaba el propio técnico navarro a última hora de la tarde, pero nada está decidido ni se puede asegurar que vaya a continuar en el banquillo de este Valencia CF en contínua ebullición. La reunión que mantuvo con los ejecutivos del Valencia CF no ha servido para acercar posturas ni para resolver las muchas dudas que tiene el entrenador sobre el proyecto, después de un decepcionante mercado de fichajes en que se ha sentido engañado por el presidente y la propiedad.

Tampoco las explicaciones de Anil Murthy, ya sea las que le dio cara a cara o a través de los medios del club, han cambiado su visión de los hechos. Así, Gracia se presentó en las oficinas con su representante para proponer una salida pactada que el club de momento ha rechazado. La decisión firme del Valencia CF, de ahí que la primera y hasta ahora única versión oficial y pública sea que Javi Gracia sigue y ha de incorporarse este jueves para entrenar como si aquí no hubiera pasado nada. Al entrenador le han trasladado que confían en su trabajo para hacer frente a esta complicada situación.

Un contrato

En estos momentos, se puede afirmar que a Gracia y el Valencia CF solo los une ya un contrato que no es fácil resolver, porque la intención con que se presentó el técnico esta mañana en las oficinas es la misma que tenía cuando se marchó dos horas después: negociar su desvinculación y no continuar en el banquillo de Mestalla. En ningún momento ha puesto sobre la mesa su dimisión, es decir, la decisión de rescindir su contrato de manera unilateral, lo que le obligaría a hacer frente a una fuerte indemnización que en su día se fijó en tres millones de euros, de la misma manera que si el Valencia CF decide en algún momento su destitución tendría que finiquitarlo. El técnico firmó hasta el 30 de junio de 2022, es decir, lo que resta de temporada y la próxima.

¿Va a cambiar alguna de las dos posturas en las próximas horas? Lo que es difícil es que haya algún cambio en el ánimo de Javi Gracia, después de que ni siquiera el apoyo del vestuario que le trasladaron los capitanes el martes por la mañana le haya ayudado a reconsiderar su decisión. Ayer, de hecho, los jugadores no sabían que el entrenador no iba a acudir al entrenamiento, se enteraron al llegar al vestuario. Y en el club también le esperaban dos horas más tarde, después de la sesión de trabajo a la que no acudió. Es complicado que cambie su manera de pensar y su confianza en Meriton. Tras casi dos meses y medio en el cargo, sigue sin haber mantenido una charla con el máximo accionista para conocer sus intenciones y tener una explicación directa de por qué el club no ha cumplido con el objetivo de reforzar el equipo con todas las salidas que se han producido. Tampoco se produjo esa conversación este miércoles pese a la gravedad de la situación.

Temporada en el aire

La situación si no hay un giro inesperado es en cualquier caso insostenible y lo que parece seguro es que, igual que hace un año ocurrió un 11 de septiembre con la salida de Marcelino García después de tres jornadas, la temporada del MarcelinoValencia CF Si Javi Gracia se va, lo que pueda venir es una incógnita dados los precedentes con el máximo accionista. Entonces se sacó de la manga la carta de Albert Celades y la cosa terminó como todos sabemos. Si se queda a disgusto, obligado por su contrato y sin más motivación, el día a día puede ser rocambolesco, con un entrenador que no se siente ya en sintonía con el club, que no confía para nada en el presidente y que está pidiendo marcharse dirigiendo al equipo desde el banquillo. Hoy, más.