El arma secreta de Gattuso en Sevilla

Foulquier hizo de todo: fue una roca en defensa, dio la asistencia del gol de Cavani, estuvo intenso en la presión y minimizó a Telles

Dimitri Foulquier persigue al Papu Gómez durante el encuentro en el Sánchez Pizjuán

Dimitri Foulquier persigue al Papu Gómez durante el encuentro en el Sánchez Pizjuán / VCF

Dimitri Foulquier fue la sorpresa de la tarde en todos los sentidos. Primero, por su titularidad, ya que era la primera en toda la temporada. Segundo, por su ubicación en el once; de carrilero largo en el 5-4-1 que alineó Gattuso, con Yunus por delante y Correia como tercer central. Y tercero, por su gran centro desde el costado derecho que dejó en bandeja a Cavani el primer gol de la tarde. El técnico italiano sorprendió con el sistema y con la incursión del ‘20’ en el once y este le respondió. Junto a Thierry y Yunus formaron un triángulo en banda derecha que generó superioridades y ventajas constantes en los ataques del Valencia. Telles, Acuña y Óliver Torres se vieron superados, perseguían sombras y llegaban siempre tarde.

En defensa, se encargó de amargar la tarde a Telles, que no pudo superarlo en ningún momento. Bien colocado, seguro detrás, corrigiendo cuando tocaba e intenso en la presión. El ‘20’ fue un hueso duro de roer y el Valencia se impuso a la banda izquierda sevillista.

Esta superioridad obligó a Sampaoli a cambiar el plan y pasó al 4-4-2. El Sevilla mejoró y en este contexto de partido Foulquier se dedicó a lo que mejor sabe hacer: perseguir, achicar, molestar y entorpecer los ataques sevillistas. El de Guadalupe fue un ‘coco’ en fase defensiva e interrumpió la circulación de los de Sampaoli hasta que vio la amarilla en el minuto 63 después de realizar su cuarta falta del partido. Con el Valencia sufriendo y estando amonestado, fue sustituido por Nico en el minuto 71 con 0-1 en el marcador.

Muy buen partido de Foulquier, que hizo de todo mientras estuvo sobre el césped y fue clave en el plan de Gattuso para asaltar Sevilla. El ‘20’ es un jugador de plantilla que está cuando se le necesita, que no se arruga cuando el partido se pone feo y ayer se pudo comprobar.