Cuatro partidos de Liga, 360 minutos sobre el césped y sólo tres goles entre los ocho delanteros que esta temporada 2018/19 han reunido, merced a un importante esfuerzo económico, Valencia CF y Villarreal CF. En el fútbol no hay nada más decisivo que el gol, razón por la que los clubes acostumbran a destinar la mayor parte de su inversión en fichajes para fortalecer la línea de ataque. El futuro inmediato de uno y otro conjunto pasa por las botas de sus artilleros. Gerard Moreno, Carlos Bacca, Toko Ekambi y Nicola Sansone, en el Villarreal; y los valencianistas Rodrigo Moreno, Kevin Gameiro, Michy Batshuayi y Santi Mina.

Por el momento el potencial de las dos delanteras a examen esta tarde en el estadio La Cerámica apenas ha despertado. Los dos equipos duermen en la zona baja de la clasificación, preocupados por la fragilidad defensiva, pero esclavos de una ansiedad ofensiva que groguets y blanquinegros se proponen erradicar a partir de las 16:15 con una receta compuesta de los siguientes ingredientes: velocidad, dinamismo y solidaridad para combinar... en definitiva, más peligro, ocasiones y acierto en el área rival.

En el Valencia de Marcelino únicamente ha estrenado su casillero Rodrigo, cuyo potente remate cerca de Oblak en el primer partido de la competición sirvió para nivelar el choque sumando un punto. Gerard y Bacca, por su parte, han convertido las dos dianas del Submarino en el torneo de la regularidad, si bien sólo la del '9' colombiano en Butarque dio el oxígeno de los puntos hace una semana. El golazo de Gerard Moreno a la Real Sociedad en el debut liguero cayó en saco roto después de los errores defensivos que propiciaron la remontada txuri urdin en Vila-real (1-2).

Los Moreno, Rodrigo y Gerard, son la referencia ofensiva de los contendientes en el derbi de este domingo. El primero se ha asentado en una selección española a la que aspira el segundo. Zurdos, móviles, inteligentes y generadores para sus equipos de un caudal constante de juego ofensivo, los dos sin indiscutibles para Marcelino y Calleja. El Valencia resistió hasta el final las acometidas de importantes clubes europeos para llevarse al hispano-brasileño de Mestalla, apoyado en la voluntad del jugador de seguir siendo un primer espada blanquinegro. El Villarreal ejecutó por 20 millones de euros en el mes de junio el regreso a casa de Gerard, algo planeado desde hacía meses. Unos días antes, también en junio, los amarillos compraron por algo más de 18 kilos a Toko Ekami, potente y veloz punta camerunés que sobresalió en Francia con el Angers.

Mientras tanto, en Mestalla el plan trazado con el técnico fue traspasar al italiano Simone Zaza a cambio de incrementar la velocidad y movilidad del ataque conforme al ideario de Marcelino. A fuego lento, por la dificultad de fichar en un rival directo como el Atlético y la necesidad de esperar el excedente de algún grande europeo, Alemany y Longoria cocinaron las contrataciones de Gameiro -16 millones más dos en objetivos- y Batshuayi, cedido por tres 'kilos' y con una opción futura fijada por el Chelsea en 50 millones. Si el plan de remodelación general valencianista se apoyó en los 40 millones que se ingresarán por Cancelo, en La Cerámica las primeras llegadas pudieron afrontarse sin problemas gracias a la misma cantidad pactada en enero por la venta de Bakambu a China. El último en aterrizar fue Bacca, dentro de la operación Castillejo y tasado en algo más de diez millones. El Milan pagó 18 por el español y cedió los derechos del 'cafetero'.

Los ocho protagonistas del gol están convocados para el derbi. El Valencia ha conformado un ataque que la temporada pasada sumó 44 goles, muchos de ellos, como en los casos Santi Mina y Gameiro, aprovechando minutos de juego en segundas partes. Por eso, los cuatro están preparados para volver a dar en la diana y lanzar con goles a un equipo que tampoco ha pasado de los tres tantos en la Liga. El citado de Rodrigo, un cabezazo de Cheryshev y el penalti convertido por Parejo en Orriols. Los cuatro del Villarreal todavía llegaron más lejos durante la anterior campaña, hasta las 53 dianas. Los currículums son óptimos en ambos bandos, motivo que invita a pensar que el carrusel de goles similar al de hace un año no tardará en coger velocidad.