La expulsión de Ramos cierra un año para olvidar

La primera tarjeta roja del camero en el fútbol francés se une a sus constantes problemas físicos

Sergio Ramos, en su debut con el PSG.

Sergio Ramos, en su debut con el PSG. / EFE

Pablo Martínez-Vilanova

Sergio Ramos ya sabe lo que es ser expulsado en la Ligue 1. El defensa, uno de los fichajes estrella del Paris Saint-Germain en el pasado verano, está teniendo un paso con más pena que gloria en sus primeros meses en la capital gala.

En el partido de ayer contra el Lorient, el que fuera capitán del Real Madrid vio dos tarjetas amarillas prácticamente consecutivas: en el minuto 81 cometió una entrada a destiempo y en el 86' fue expulsado al frenar un contragolpe del equipo rival. Para más inri, el defensor apenas llevaba cuarenta minutos en el campo, ya que había entrado en el descanso en sustitución de Nuno Mendes.

Ramos no pudo debutar con el cuadro parisino hasta el pasado 28 de noviembre. Sus problemas de rodilla le hicieron perderse la Supercopa, las catorce primeras jornadas de la Ligue 1 y la fase de grupos de la Champions. Su balance en la primera mitad de la temporada se reduce a un partido y medio de la competición liguera y 45 minutos en la Coupe de France.

Con esta tarjeta roja, el central cierra un 2021 para el olvido. El final de su etapa en el Real Madrid fue decepcionante tanto en lo personal por las lesiones como en lo colectivo por quedarse en blanco. Además, el de Camas se perdió la Eurocopa y apenas ha podido disputar 175 minutos con el Paris Saint-Germain.