El ‘no’ de Marc Pubill al Barça

Marc Pubill afronta el encuentro contra el Barça echando la vista atrás y asumiendo que será un día especial para él. Después de haberse medido al Espanyol, equipo del que formó parte en categorías inferiores y haciéndolo desde la titularidad, el ‘42’ mira de frente al conjunto azulgrana no solo con la ilusión de vencer a uno de los equipos más en forma del Viejo Continente, sino con las ganas de demostrar sus capacidades contra un club que coqueteó con sus servicios en el pasado y en más de una ocasión. 

Con 12 años, y en su temporada de Alevín, el lateral tuvo encima de la mesa una oferta en firme procedente del Camp Nou después de que, un curso antes, los culés ya mostrasen un fuerte interés en firmar al nacido en Terrassa. Sin embargo, su estado de felicidad y bienestar como perico hicieron que desestimase la posibilidad de jugar en el Barça, próximo rival a batir del Levante en su pelea por lograr la permanencia. Una decisión que supuso el inicio de una reinvención futbolística por parte de Marc Pubill, que desembocó en el Ciutat de València y que, a día de hoy, le produce el orgullo y la ilusión de defender el escudo levantinista.  

Marc Pubill da un golpe de aire fresco al lateral

Una vez le cerró la puerta al cuadro culé, con el Espanyol, entidad a la que llegó con ocho años, firmó un contrato hasta 2022 que quedó en vano tiempo después pese a que, en aquella temporada, competía en Infantil siendo de categoría Alevín. Un año más tarde, un cambio en la coordinación de la cantera del club blanquiazul coincidió con su falta de crecimiento en el apartado físico, derivando en desconvocatorias y en ausencia de protagonismo. Una situación que, con 15 años, le obligó tanto a renunciar al salario que le correspondía como a lo que le restaba de contrato. 

Aunque el destino quiso que su 'no' al Barça se tradujera en meses convulsos en los primeros pasos de su trayectoria deportiva, el Levante apareció en el camino de Marc Pubill para beneficio de un futbolista que apunta bien alto en Orriols. Después de tres temporadas en el Gimnàstic Manresa, un partido le bastó a Javier Valls y Xavi Camps, scoutings del club granota, para que su actuación ante el CE Europa les cautivase. Según fuentes cercanas al jugador, el flechazo de Marc con el Levante fue inmediato. Sobre todo, por cómo le trató desde el primer instante que pisó Buñol. Casi dos años después de su llegada, el lateral, apuesta fuerte del club y con contrato hasta 2026, tiene ganas de mirarle a los ojos al Barça. Club que le quiso en el pasado y ante el que jugará feliz y orgulloso de ser levantinista. 

El calendario será muy duro para todos