El calvario de Iborra llega a su final contra el Burgos

Javi Calleja espera con los brazos abiertos al ‘10’, que concluye casi un mes de castigo tras su injusta sanción ante el Getafe

Iborra, en el momento de su injusta expulsión

Iborra, en el momento de su injusta expulsión / Francisco Calabuig

Rafa Esteve

Rafa Esteve

Casi cuatro semanas después de su expulsión contra el Getafe en Copa del Rey, y en medio de una injusticia contra la que se peleó por todos los medios, Vicente Iborra vuelve a estar disponible para su Levante sin que nada ni nadie altere su ilusión por ascender a la élite del fútbol español. El ‘10’, tras perderse los encuentros contra el Sporting, el Granada, el Atlético de Madrid y el Leganés, donde el equipo levantinista obtuvo cinco puntos y puso contra las cuerdas a los de Diego Pablo Simeone a pesar de no acceder a la siguiente ronda, podrá entrar en la lista de convocados de cara al que será un partido importante para seguir opositando a los puestos de ascenso directo a Primera División.  

Durante el periodo en el que el canterano ha estado inhabilitado por sanción, el club trabajó para que la condena se eliminase o, como mínimo, se redujera. Sin embargo, todos sus intentos quedaron en vano ante la inoperancia de los estamentos a los que tuvo que acudir. Primero, el Comité de Apelación mantuvo el castigo impuesto por Competición cuando la entidad granota reclamó, con pruebas en mano, que le quitasen la sanción. Y una semana más tarde, el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) tomó la decisión de no otorgar la cautelar al medio. Una serie de circunstancias que han frustrado a todas las partes y que ha supuesto el cumplimiento de la injusta sanción con tintes de resignación. 

Mientras, y desde el silencio, Vicente Iborra ha trabajado para volver más fuerte, tanto mentalmente como físicamente. Ansioso por estar remando junto al resto de sus compañeros hacia el objetivo del ascenso a Primera División, pero consciente de la situación y contando los días para volver a estar disponible para Javi Calleja. Pieza trascendental en el vestuario por todo lo que representa y transmite en el día a día, el centrocampista, sin embargo, no dejará de defender sus intereses y, ni mucho menos, sus colores.

«Quiero agradecer a los míos, a los que han alzado la voz y me han apoyado en esta situación. Ni esperaba ni necesitaba nada de nadie más. Los míos, los de siempre y por los que seguiré poniendo la cara las veces que haga falta», dijo en sus redes después de que Apelación ratificase su sanción. El capitán, por fin, está de vuelta.