Prohibido volver a fallar

Por enésima vez este curso, los rivales directos le dan al conjunto de Javi Calleja la oportunidad de atacar puestos de ascenso directo después de aprender la lección contra el Zaragoza

El Levante está ante una grandísima oportunidad de asaltar el ascenso directo pese a su mala racha.

El Levante está ante una grandísima oportunidad de asaltar el ascenso directo pese a su mala racha. / Francisco Calabuig

Rafa Esteve

Rafa Esteve

La derrota del líder de la Segunda División, la SD Eibar, en el estadio del Albacete y el tropiezo de Las Palmas, próximo rival granota, en Los Cármenes mete al Levante, por milésima vez esta temporada, en una situación idílica para asaltar plazas de ascenso directo. En esta ocasión, en un tramo de curso en el que los objetivos arden y donde las emociones están a flor de piel, pero donde el conjunto de Javi Calleja, si quiere subir a la élite del fútbol español, debe huir de la tensión del reto, confiar más que nunca en sus posibilidades, creer en todo el potencial que atesora y, sobre todo, marcar diferencias, empezando por la cita contra el Mirandés, en el tramo final de competición liguera.

El Levante tiene la obligación de escapar de su crisis de resultados y de sensaciones empezando por conseguir los tres puntos este lunes en el Ciutat de València. El equipo granota afrontará el partido sabiendo lo que han hecho el resto de adversarios directos. Esta tarde, todo el levantinismo estará al tanto de lo que suceda en Gijón. El Alavés, otro de los inmersos en la pelea, visita el Molinón y las esperanzas estarán depositadas en que, tal y como sucedió hace dos semanas con el Granada, el Sporting le arrebate puntos al conjunto babazorro. Independientemente de lo que hagan los de Luis García Plaza, los de Javi Calleja volverán a Orriols con la lección aprendida tras el resbalón del Zaragoza. Sin embargo, y pese a los puntos perdidos por el camino desde que el Levante claudicó en Huesca, el transcurso de la Segunda División vuelve a poner a los del Ciutat de València en una posición idónea para ir a por el reto de ascender a Primera.

El Eibar, que se quedó a cuatro de diferencia después del empate del cuadro de Orriols en Ipurúa, sigue a la misma distancia tras caer en el Carlos Belmonte. Aunque el Albacete oposite a una de las plazas de promoción de ascenso, su triunfo le echó un cable a los granotas, que fueron testigos de cómo el Granada de Paco López, con los mismos puntos que el Levante antes de su duelo frente a Las Palmas, sumó de tres, presionó al líder al colocarse a tan solo un punto y, de paso, acrecentó la mala dinámica de los de García Pimienta. Quienes, durante gran tramo de la temporada fueron los candidatos más serios para ascender, acumulan seis puntos de los últimos 21 posibles. El Levante, que tampoco luce sus mejores galas al contar con solo una victoria de las últimas seis, tiene una ocasión de oro ante al Mirandés para atacar, de una vez por todas, el ascenso directo. Es el momento de dar un golpe de efecto.