Un mejor trato no habría estado nada mal

Sin necesidad de tirar de hipérbole para dramatizar con el estado de Mestalla, pero desde la más absoluta objetividad, que el estadio valencianista esté así a una semana del centenario es otra más de Meriton

Mestalla, iluminado al atardecer

Mestalla, iluminado al atardecer / SD

Pablo Leiva

Pablo Leiva

Sin necesidad de tirar de hipérbole para dramatizar con el estado de Mestalla, pero desde la más absoluta objetividad, que el estadio valencianista esté así a una semana del centenario es otra más de Meriton. Que las cosas hay que cuidarlas y dar cariño es tan evidente como que Peter Lim y compañía no se han preocupado mucho de hacerlo desde que están en la entidad. Por mucho que se empeñen algunos en decir que es así. De hecho, Joey Lim bailando en el Reale Arena o Anil Murthy mandando callar a la grada son los mejores ejemplos de que no tenían ningún tipo de decoro. Pero aún sabiendo todo eso sorprende que Mestalla, por lo que representa y por lo mucho que lo repiten cuando las cosas van mal para tratar de que empuje, tenga la estética que tiene en estos momentos. Es una lástima que el viejo esté en estas condiciones y el ‘nuevo’ -o no tanto- siga sin mover ni una sola piedra para poner en marcha las obras tantos años después. 

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