Valencia Basket, modelo de gestión económica en la Euroliga

Sitapha Savané ha hecho los deberes para la posible participación del Gran Canaria en la próxima Euroliga como campeón de la EuroCup. Según ‘La Provincia, diario de Las Palmas’, la calculadora del presidente claretiano estima que el incremento presupuestario de la campaña 2023/24 debe ascender a una cantidad entre cuatro o cinco millones de euros más respecto a la actual. O lo que es lo mismo, deben manejar como mínimo trece millones el próximo curso para "tener una imagen digna".

Los modelos de referencia que ha tomado en cuenta el club insular para poder asumir una temporada sin problemas en la Euroliga han sido los del Alba Berlín, donde Himar Ojeda es el director deportivo, y el Valencia BC. El primero por el vínculo grancanario existente y dada su estructura institucional independiente; el segundo, por la similitud de competir en la misma competición nacional y por el hecho de que accede vía EuroCup sin tener la condición de ser un club con licencia.

La invitación al Valencia Basket a la Euroliga, pendiente del Gran Canaria

Contactos desde Gran Canaria con Berlín y València

Con ambas entidades, el 'Granca' ha mantenido una línea directa comunicativa. Precisamente, si el club isleño no encuentra la financiación que requiere, el Valencia BC sería uno de los principales candidatos a volver a ser invitado en una estructura de equipos para la campaña 23/24 muy parecida a la actual, donde el Mónaco, en la Final Four, repetirá nuevamente por su excelente rendimiento deportivo.

En este sentido, el Gran Canaria sabe que si se gastó en 2019 un millón cien mil euros en traslados por Europa, este año tiene que llegar hasta el millón y medio "como mínimo" para poder recorrer los 110.000 kilómetros que realizó hace cuatro años. "Eso fue lo que se gastó el Valencia BC y ellos no tienen que viajar desde África como nosotros. Cuando jugaban EuroCup gastaron medio millón y en la Euroliga alcanzaron el millón y medio", aclara Savané.

La otra necesidad económica apunta a la confección de la plantilla. "Para poder competir con los mejores clubes de Europa hay que destinar entre dos millones y medio o tres, más el apartado técnico", resalta el presidente. El apartado de jugadores del equipo acb de esta temporada maneja 4.190.947,93 euros presupuestados. Por tanto, el objetivo es llegar a los 7 millones.

Estas dos necesidades se plantean como mínimos para poder llevar una temporada sin sobresaltos. Cabe recordar que cuando el ‘Granca’ disputó la Euroliga hace cuatro años el balance de cuentas arrojó una deuda de 800.000 euros en un ejercicio de 10.650.000 euros, por lo que el montante se elevó hasta los 11,5 millones. 

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El Gran Canaria aleja de la Euroliga al Valencia Basket

Tres vías de financiación de un proyecto de Euroliga

Desde la entidad claretiana apuntan a tres vías posibles para costear las necesidades monetarias de la Euroliga. La primera pasa por hacer consciente al entramado empresarial privado de que "a segunda competición de baloncesto del mundo es una ventana atractiva para publicitar su marca", como indica el presidente insular. Las negociaciones con un patrocinador principal progresan de modo positivo. La segunda alternativa, en paralelo, es la de lograr un mayor compromiso económico de las autoridades autonómicas del Cabildo. Y la tercera, el aumento del precio de los abonos.