EL ANÁLISIS DEL 'URU'

Empate a errores en La Catedral

A diferencia de otras ocasiones, en Bilbao el Valencia CF de Javi Gracia compitió y dio la cara

Gonzalo de los Santos

Reparto de puntos con justicia en La Catedral. Ninguno de los dos, ni Athletic Club ni Valencia CF, completó un partido trascendente durante 90 minutos con el que haber merecido algo más. A diferencia de otras veces, los de Javi Gracia compitieron, lucharon y dieron la cara en Bilbao. Cada vez el equipo se recita mejor de memoria, una señal de cierta continuidad positiva.

En los primeros minutos se comprobó la intención valencianista de ser un equipo corto, concentrado desde la línea de ataque a la defensiva en apenas 25 metros. Enfrente, un rival clásico con el patrón de Marcelino para abrir espacios en el medio y generar dificultades al doble pivote Racic-Soler con la presión inmediata de tres centrocampistas. Ahí radicaba el plan de los leones, la zona en la que robar balones para iniciar la transición rápidamente hacia la portería de Jaume Domènech.

Durante la primera mitad funcionó el triángulo formado por Soler, Wass y WassCorreia para dar verticalidad al pasillo derecho. Maxi fue el beneficiado, pero el de Paysandú no pudo definir con comodidad los centros al área de Unai Simón. Precisamente, fue en el mismo corredor, tras un saque fugaz del portero vasco, donde el Athletic ganó las espaldas a Thierry en la acción desafortunada del 1-0. Morcillo colocó esos centros entre el portero y el central tan difíciles de despejar.

En el inicio del segundo acto los de Marcelino adelantaron líneas y tuvo que ser Jaume el que mantuvo viva la esperanza jugándose el pellejo en un remate a bocajarro. A falta de 20 minutos, el Valencia había vuelto a competir el partido. Gracia vio espacios para correr dando entrada a Musah y Cutrone. Y Gabriel, con una gran colocación y un doble ritmo espectacular, firmó con la cabeza el 1-1 al aprovechar el centro con la pierna natural de Soler.

Lo mejor para los dos equipos fue llegar al minuto 85 empatados en un partido de errores por ambos bandos.