La poca efectividad se pagó cara

El Valencia cayó contra el Espanyol el último día del año en un partido en el que arrancó muy bien, pero que acabó dejando escapar especialmente condicionado por las bajas y por la expulsión de Hugo Duro. El equipo fue mucho más sólido en la primera mitad y el encuentro se le marchó pasada la hora de juego.

Los blanquinegros afrontaron el duelo desde el clásico 1-4-4-2 que caracteriza al equipo de Bordalás y como suele ser habitual, entregó la posesión del esférico (57 por cien para el Espanyol) tratando de hacer daño presionando arriba y con veloces transiciones ofensivas, un guion muy similar al que trata de plantear el Valencia.

¿Fue penalti de Hugo Duro a Jofre?

Entre las cifras más llamativas se encuentra que el equipo aumentó las posesiones largas (las que duran entre 20 y 40 segundos) teniendo incluso más que el rival (14-11), algo poco habitual. A pesar de ello, la primera hora de partido incluso con alternancias el Valencia estuvo cómodo e incluso de adelantó en el marcador. Pero fue nuevamente pasada la hora de juego (entre el minuto 60 y el 75) cuando disminuyeron las acciones con balón por parte de los valencianistas (un 25 por cien en este caso) y como consecuencia, aumentaron las acciones de peligro del rival y sus probabilidades de marcar.

Poca producción del Valencia CF

A pesar de buscar la portería en diferentes tramos del choque, la realidad es que el Valencia tuvo un gran problema de profundidad y acierto en sus acciones. El equipo firmó su segundo peor dato del curso en goles esperados (xG, que es una métrica que estima las probabilidades de marcar de un equipo según el número de acciones ofensivas que genera y la calidad de las mismas) en Mestalla, solamente por delante del encuentro contra el Atlético de Madrid.

Para explicarlo hay que fijarse en los tiros. De los 10 realizados (Wass con 3) solo 1, un 10 por cien, obtienen el premio de ir a puerta, el dato más bajo de la temporada. También los centros fueron muy esclarecedores: el equipo hizo 19; 8 fueron en la primera parte y solamente tres exitosos, un porcentaje muy bajo. En la segunda mitad el panorama fue distinto y a través de un envío lateral llegó el gol de Alderete.

Buena presión y pocos despejes

A nivel defensivo el equipo no estuvo mal en líneas generales, de hecho los duelos ganadores totales cayeron de su lado en las dos partes. Las recuperaciones fueron similares, destacando el Valencia en las altas (16) firmando sus mejores datos de la temporada, unos guarismos que contrastan con las 3 del rival y dominando a la hora de robar en campo Espanyol con 28 por las 17 del equipo de Vicente Moreno.

En estas recuperaciones destacan Jesús Vázquez, Guillamón o Rendall con 11 cada uno. Un dato curioso son los solo 4 despejes por parte del Valencia, al nivel del enfrentamiento ante el Mallorca (3) cuando su promedio son 17.95 entendiendo la importancia que tienen los despejes en las transiciones posteriores.