Cuando Javi Gracia aterrizó en València, uno de los nombres que estaba encima de la mesa para llegar era el de Borja Mayoral. La delantera se encontraba mermada con la salida de Rodrigo Moreno y el madrileño, que había jugado las dos temporadas anteriores en el Ciutat, era el elegido para ocupar esa vacante.

El interés entre ambas partes era evidente. Sus agentes y el club tuvieron una reunión para cerrar una operación que se antojaba difícil debido a la delicada situación económica valencianista.

Finalmente, las negociaciones no llegaron a buen puerto porque el Valencia no llegaba a las pretensiones del Real Madrid. Mayoral recaló en la Roma donde jugó bien hasta que Mourinho, al igual que con Villar, le comunicó que no contaba con él.

El jugador llegó al Getafe este invierno y ha sido importante. En los siete partidos que ha disputado ha marcado tres goles.