Lim pierde excusas en el mercado

Las últimas reformas de LaLiga, que entran en vigor en enero, ayudan a entidades como el Valencia. Meriton, sin embargo, no tiene previsto reforzar la plantilla de Baraja

Peter Lim, Tebas, Layhoon, Solís y Corona

Peter Lim, Tebas, Layhoon, Solís y Corona / SD

Rafa Jarque

Rafa Jarque

El próximo martes dos de enero arranca el mercado de fichajes invernal y lo hace con mayor flexibilidad para todos los equipos de LaLiga respecto a las últimas ventanas. Y es que esta semana se confirmó que entran ya en vigor hasta tres modificaciones orientadas a que los clubes puedan reforzar sus plantillas sin tantos obstáculos financieros. En este sentido, estas reformas dejan en cierta medida sin excusas a Meriton, que lleva varias temporadas apoyándose, entre otras cosas, en las duras normas de LaLiga para justificar que apenas se ha invertido dinero en una plantilla que cada vez está más debilitada y cerca del descenso, como casi ocurre en el curso 22-23.

LaLiga, presidida por Javier Tebas, impuso en los últimos ejercicios una política restrictiva en el capítulo de fichajes para obligar a los clubes españoles a reflotar sus economías. El plan de control, sin embargo, fue tan exigente que dejó a todos los clubes inermes a la hora de competir por la contratación de los mejores futbolistas. Ahora Javier Tebas y sus ejecutivos han aceptado rebajar parcialmente su presión y una de las medidas va enfocada al porcentaje de dinero que los equipos que gastan más de lo que ingresan podían gastar. Antes únicamente podían destinar a fichajes 1 de cada 4 euros (el 25 por ciento). El pasado año la competición abrió el grifo y lo subió al 50 por ciento, y a partir del 2 de enero los clubes españoles podrán reinvertir hasta el 60 por ciento de los ingresos por beneficios y traspasos a fichajes, que pueden llegar hasta el 70% si los ingresos generados por un traspaso proceden de la salida de un jugador considerado ‘franquicia’ (un futbolista cuya ficha suponga más de un 5 por ciento del límite salarial).

Ampliación de capital

Otra medida es que los clubes que son SAD, entre los que se encuentra el Valencia CF, podrán utilizar futuras ampliaciones de capital para reducir las pérdidas generadas durante la pandemia del COVID, consiguiendo de esta forma un mayor margen salarial. Además, estas ampliaciones se podrán utilizar repartidas en dos años en vez de cuatro, consiguiendo un impacto más inmediato. En este aspecto el conjunto de Mestalla queda sujeto a Peter Lim y a si en algún momento decidiera llevar a cabo otra amplicación de capital. Además, los clubes con unas cuentas saneadas podrán destinar íntegramente estos ingresos por ampliación de capital para realizar fichajes, mientras que los tengan problemas económicos estarán limitados al 70 por ciento. En las cuentas anuales publicadas a mediados de noviembre, el club informó que estaban en «una situación de ‘break even’ (situación de equilibrio económico) antes de impuestos por primera vez desde el ejercicio 18-19». 

Javier Tebas, en un acto de LaLiga

Javier Tebas, en un acto de LaLiga / LaLiga

Finalmente, el estamento que preside Javier Tebas también permitirá que los clubes puedan reflejar el impacto negativo de las obras de mejora en sus estadios para que no se vean penalizados doblemente. Las reducciones de aforo y de ingresos que se producirán durante estos periodos de transformación de las instalaciones no repercutirán en su límite salarial durante dos temporadas.