La maldición del lustro contra el Sevilla en Mestalla

La estancia de Meriton Holdings en el Valencia CF ha desnaturalizado por completo la rivalidad deportiva con el Sevilla. Salvo en alguna excepción, el club de Nervión ha estado por encima de los valencianistas ocupando plazas europeas y sumando títulos a sus vitrinas. La gran decadencia, que llegó después de la salida de Marcelino García Toral trajo consigo también una época de muchas dificultades en los duelos directos y de ninguna campaña quedando por delante en la clasificación, dando como resultado una maldición que se ha extendido hasta Mestalla, principal valor competitivo del equipo en estas oscuras temporadas, donde el Valencia no ha conseguido ganar al Sevilla ni una vez en las últimas cinco temporadas.

Tres empates y dos derrotas son el saldo de las últimas visitas del conjunto de Nervión a tierras valencianistas. La última vez, cargada de polémica por las manos que Del Cerro Grande no pitó de Fernando en el área, se saldó por un triunfo sevillista por cero goles a dos que dejó al Valencia asomado al abismo y Mestalla completamente en llamas por la cercanía del fantasma de la Segunda División mientras que el Sevilla, que a principio de temporada corría peligro, se terminó salvando holgadamente. 

El anterior (2022) se saldó con un empate en el que marcaron Gonçalo Guedes y Mouctar Diakhaby con José Bordalás en el banquillo mientras que en el año 2020 quien venció fue otra vez el conjunto andaluz con un golazo de Suso que ponía fin a una mala racha hispalense en el la Avenida de Suecia de nueve años sin ganar. Las dos anteriores fueron empates y para encontrar el último triunfo habría remontarse a la primera temporada de Marcelino en Mestalla que se saldó con un contundente 4-0 en el que brilló Guedes con un gol antológico.  

Victoria en la ida

Esta temporada la crisis más grande está siendo sin duda la del Sevilla, más cerca del descenso y con la fortuna de que esta temporada estará mucho más barato salvarse que el curso anterior. El Valencia CF, de hecho, le pegó la primera gran estocada del curso con un gran triunfo en el Ramón Sánchez Pizjuán ganando mucho crédito el proyecto de un Rubén Baraja que quiere hacer lo propio ganando este fin de semana en Mestalla, rompiendo el maleficio y con la esperanza de volver a dibujar un cambio de tendencia en la relación competitiva con el Sevilla, que a final de esta temporada le va a tocar hacer muchos ajustes económicos al quedarse sin Europa. 

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