El viernes por la noche el Valencia CF sorprendió. La política de comunicación del club de Mestalla es extraña desde hace tiempo y no amaga con dejar de serlo. A través de los canales oficiales de la entidad de Mestalla se difundió una carta abierta del presidente Anil Murthy a los valencianistas. Es, básicamente, una explicación por parte del dirigente de la situación actual y es, sobre todo una reacción del presidente al tremendo enfado y malestar que existe entre los aficionados con la gestión que él y el máximo accionista del club, Peter Lim, están haciendo en los últimos meses.

La representación gráfica del enfado y la preocupación de los valencianistas es la manifestación del pasado miércoles día doce de agosto cuando mil aficionados acudieron a protestar de manera cívica contra la gestión de Meriton, pero tiene muchas más ramificaciones que han hecho mucho ruido a nivel internacional hasta el punto que han llegado a Singapur. Sea como sea, lo que es evidente es que en Meriton hay preocupación por el divorcio con la afición de ahí que ahora traten de 'comunicarse', es decir, traten de dar explicaciones. Que lo hagan ya es en sí una novedad, si bien lo hacen a su manera, es decir, a través de los canales oficiales. Esta vez ha sido una carta de Anil Murthy a los aficionados, y hace meses, tras la destitución de Marcelino y el fichaje de Albert Celades, fue una entrevista en los canales oficiales también. En cualquier caso, no una rueda de prensa.

Y mientras en el entorno del Valencia CF sigue el estruendo por el eco de la carta de Anil, diferentes medios de comunicación internacionales escriben desde la sorpresa sobre lo que sucede alrededor del club. Si hace unos días el periódico de Singapur The Strites Times llegaba a decir que si Lim no es capaz de enderezar el rumbo del equipo lo mejor para él tal vez sea "salir" del Valencia CF porque la situación no solo afecta al club y a sus aficionados, también le pasa factura a él, ayer domingo otro diario del país asiático y uno británico, describen cada uno a su manera, desde la distancia pero poniendo el dedo en la llaga y con bastante tino, el errático rumbo de la entidad bajo el mandato de Peter Lim.

Today, diario de Singapur, además de repasar las malas decisiones del máximo accionista en los últimos meses con especial hincapié en el cese de Marcelino, centra parte del debate de su reportaje en la falta de identidad que tiene ahora mismo el Valencia CF, o mejor dicho, en que ha perdido arraigo entre sus aficionados, con reflexiones de aficionados valencianistas que achacan a Meriton que no entiende que el club de Mestalla es una entidad para la ciudad y para la gente.

Por su parte, el periódico inglés Daily Mirror titula duro y va directo a la yugular dado que se trata de una publicación con un talante más sensacionalista: 'Valencia CF en crisis: Cómo el gigante español se ha convertido en un club roto'. El autor Coin Millar arranca con la salida de de pesos pesados del vestuario a precio de ganga y hace hincapié en Ferran Torres, Francis Coquelin y Dani Parejo, poniendo especial asombro sobre la del capitán de manera gratuita a un rival regional.

Ambos periódicos se hacen eco de la vigilia de protesta de los aficionados en la Plaza de la Afición del Valencia CF que diferentes aficionados y miembros de la Plataforma Salvem Nostre Valencia CF, se encarga de mantener viva cada día. Desde que el pasado miércoles doce de agosto colocaran velas junto al monumento de la Plaza, no han dejado que la llama se apague. Esas velas son el vivificante ejemplo del momento que vive Meriton, son la expresión de una afición dolida y enfadada que pide y exige cambios. Las imágenes de las velas dan la vuelta al mundo y se han convertido en un símbolo, en algo así como la conciencia de Peter Lim y Anil Murthy, que ahora están obligados a reaccionar ante la abrumadora petición de los aficionados. De momento, el club se plantea la posibilidad de recuperar la figura de un portavoz, que sería la manera de intentar reconstruir el puente con los aficionados. Meriton se encuentra ante una encrucijada de dimensiones considerables porque a la situación social se añade un complicado panorama económico que le ha llevado a tener que echar mano de pagarés para afrontar el pago de las fichas a los futbolistas por problemas de liquidez. El descenso de los ingresos por no estar en la Liga de Campeones y la incertidumbre del impacto que pueda provocar el coronavirus en el presupuesto no es cualquier cosa, ya que pueden descender también los ingresos por televisión de la misma manera que se ven afectados los ingresos por abonos porque esta temporada no hay campaña de abonos como tal debido a que en estos momentos es imposible predecir cuándo podrá volver el público a los estadios. En términos futbolísticos la combinación es explosiva: una afición enfadada y cansada de malas decisiones y una economía que obliga a vender y te permite fichar poco. Renovarse y reaccionar o vender, esa es la cuestión. De momento la realidad es tozuda, Lim no tiene ninguna intención de vender su paquete de acciones, ese que le convierte en el máximo accionista del Valencia CF SAD.