Agricultores en pie de guerra contra el aumento del caudal ecológico del Tajo

Los planes del Gobierno acabarán con 5.000 empleos y 25.000 hectáreas de regadío, alertan los afectados

Agricultores de Alicante durante una tractorada en defensa del trasvase en mayo de 2021.

Agricultores de Alicante durante una tractorada en defensa del trasvase en mayo de 2021. / MATIAS SEGARRA

F. J. Benito

F. J. Benito

El Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (80.000 agricultores en Murcia, Almería y Alicante) se han vuelto a levantar en pie de guerra contra el Gobierno tras tener constancia oficial del aumento del caudal ecológico del Tajo en Toledo y Aranjuez, que en su opinión va a suponer supondrá la eliminación de 25.000 hectáreas de regadío y 5.000 empleos.

El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico no cede y para recuperar el curso fluvial del Tajo, enturbiado por las aguas mal depuradas en Madrid, “sacrifica el regadío del sureste español”, que rechaza, por cara, el agua de las desaladoras, indican los afectados.

La polémica saltó a la actualidad hace tres años y, lejos de apagarse, se ha enquistado aún más, pues este mes se conocerán los nuevos planes hidrológicos 2022-2027, entre ellos el del Tajo, que tiene un caudal ecológico de 6 metros cúbicos por segundo y se va a duplicar, lo que afectará directamente al trasvase.

En total, la elevación de los caudales ecológicos representará la pérdida de 105 hectómetros cúbicos de agua del travase todos los años, que deberá ser suplida por agua desalada. Una demanda que, hoy por hoy, no puede ser atendida por las desaladoras por su falta de capacidad de producción. Además, según los afectados, tiene un precio insostenible, incluso con la subvención de este año, que la ha dejado en torno a los 0,5 euros por metro cúbico.

“Esta pasada semana celebrábamos el 43 aniversario de la llegada de las primeras y solidarias aguas del Tajo a la cuenca del Segura. En cualquier parte del mundo agua es sinónimo de vida, de generación de modos de vida, en definitiva, de progreso y desarrollo”, reza el comunicado de Lucas Jiménez, presidente del Sindicato Central de Regantes. 

Equilibrio medioambiental

“En las provincias más áridas de Europa, Alicante, Almería y Murcia, supimos entender rápidamente el modo de vehicular esa agua y orientarla al desarrollo social y económico, no solo de nuestras provincias, sino de la propia nación española”, añade Jiménez.

Trasvase-Tajo-segura.

Trasvase-Tajo-segura. / Efe

Organizaciones empresariales y agrícolas subrayan que el equilibrio que las aguas del trasvase aportan al sistema de mezcla de tarifas y de calidades de recursos es primordial para el sostenimiento social y económico de las provincias afectadas.

“Se puede coexistir con otros recursos, pero no vivir en ausencia de trasvases. El Levante vive en un permanente equilibrio medioambiental, económico y social basado en la multiplicidad de recursos, cuyo pilar indiscutible es el agua del trasvase”, apuntan.

“Somos sociedades responsables, que desde hace años vivimos inmersas en la escasez de recursos sin llegar, ni de lejos, al límite del crecimiento empresarial y poblacional que nuestro prodigioso clima podría permitirnos, en un claro ejercicio de compromiso por el equilibrio medioambiental”, añaden.

“Conscientes como nadie de la escasez, hemos inculcado y asumido, generación tras generación, el ahorro de agua como una forma de entender y proyectar a futuro la vida. El ahorro en los hogares, en los negocios, en las huertas es la marca resiliente que caracteriza al levante español”, claman los agricultores.

Lamentan que el esfuerzo realizado durante 43 años por ciudadanos de a pie, administraciones, comunidades de regantes, agricultores, ganaderos, empresarios y cooperativas de todos los sectores en aras a conseguir la que quizá sea “la economía orientada al agua más circular de Europa y del mundo, ha pasado desapercibido fuera de nuestras fronteras y en ocasiones dentro de ellas también”.

"Turbia dialéctica política"

“Nunca debió de entrar el recurso agua en el juego de salón político, nunca debió la transparencia del agua enturbiarse con turbia dialéctica política”, señalan los denunciantes.

Lucas Jiménez advierte, en este sentido, de que Murcia, Alicante y Almería no pueden ver reducidas sus expectativas de agua del trasvase en un 50%. De consolidarse el borrador de Plan Hidrológico del Tajo, serían 105 millones de metros cúbicos de agua (cien mil millones de litros anuales).

Vista aérea de la infraestructura del trasvase en la Vega Baja de Alicante

Vista aérea de la infraestructura del trasvase en la Vega Baja de Alicante / TONY SEVILLA

Esa reducción del Tajo-Segura prevista para ya afectaría al conjunto del regadío dependiente del acueducto”. Todas las dotaciones se verían reducidas y, en definitiva, el conjunto de uno de los regadíos más sofisticados y sostenibles del mundo podría peligrar. Y con él, según regantes y empresarios, “las posibilidades futuras de abastecimiento de las más de dos millones y medio de personas que habitamos y bebemos en nuestros hogares, agua del trasvase Tajo-Segura. Las pérdidas de empleo, por desgracia, no son exactas por mucho que nos empeñemos en hacer números”, alertan.

“Uno, mil, cinco mil o quince mil, desempleados, más que suponen una, mil, cinco mil o diez mil dramas familiares y sociales que, independientemente de los difíciles momentos que vivimos, estas provincias no se pueden permitir ni siquiera a futuro” advierte el presidente del sindicato.

Asaja Alicante apela personalmente al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para que defienda con todo su peso político el mantenimiento del trasvase Tajo-Segura en esta fase semana clave de redacción y revisión de los planes hidrológicos de cuenca.

Destrucción de empleo y riqueza

“Necesitamos una postura fuerte y contundente del presidente, de la consellera Mollà y de todos los altos cargos de la Generalitat en contra del aumento de los caudales ecológicos del Tajo. Más cuando nos llegan noticias de que en otras cuencas del país se están atendiendo las peticiones de los agricultores para mantener los caudales actuales”, sostiene José Vicente Andreu, presidente de Asaja Alicante.

Lucas Jiménez, presidente del Sindicato Central de Regantes

Lucas Jiménez, presidente del Sindicato Central de Regantes / Información

Andreu aplaude el apoyo al presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Mario Andrés Urrea, y le insta a doblar esfuerzos. “No estamos dispuestos a renunciar a nuestro modo de vida”, zanja el dirigente agrario.

Andreu cree que la vicepresidenta Teresa Ribera debe “entrar en razón” y renunciar a aumentar los caudales ecológicos.

“Ribera pretende dejar el trasvase exclusivamente para abastecimiento y limitar el riego a 105 hectómetros cúbicos anuales, lo que implicaría una destrucción de empleo y riqueza brutal que no estamos dispuestos a asumir. Supondría sustituir el agua trasvasada por agua desalinizada y el cierre paulatino de la conducción. No vamos a tolerar que nos impongan esa hipoteca”, asegura el presidente de Asaja Alicante.