Días decisivos en la carrera a la presidencia

El levantinismo vive unas semanas que marcarán su futuro como identidad. Desde que Quico Catalán confirmó este miércoles que dejará la presidencia del club tras un mandato de catorce años la pregunta es ‘Y ahora qué’. Por el momento son dos las figuras que han dado un paso adelante y han ofrecido sus proyectos para el nuevo Levante. El nuevo Consejo de Administración heredará una temporada ya en marcha en lo deportivo y una situación económica delicada tras las pérdidas de más de cuarenta millones de euros. Los proyectos de la segunda fase de la reforma del Ciutat de València y la nueva ciudad deportiva en Nazaret, con la licencia de obras ya aprobada, serán uno de los principales retos de los nuevos gestores.

En el mismo Patronato del día 28 presentó su proyecto José Dánvila. El actual consejero, uno de los cinco que se incorporaron en la renovación de la directiva de 2018, propuso un plan de viabilidad para inyectar quince millones de euros de la mano de Vicente Boluda. El empresario, sin embargo, aseguró que esa cifra sólo sería el inicio de una inversión que debe ser mayor. Eso sí, dejó claro que no pondrá un euro hasta que se certifique el traspaso de poderes. Aunque fue muy duro con el Consejo sí mostró su confianza en Dánvila, del que aplaude que haya puesto sobre la mesa la vía de la financiación. De hecho, el directivo se ha trasladado a Londres para sondear opciones económicas.

La otra vía definida para el futuro del club es la de Miguel Ángel Valiente. El empresario confirmó su candidatura a presidir el Levante días atrás y ha ‘fichado’ para su proyecto a levantinistas reconocidos como el mítico futbolista Vicente Latorre, Alberto Villanueva y Valentín Serrats. Su holding empresarial factura siete millones y medio de euros anuales y da trabajo a 320 empleados. Además de sus negocios gestiona el Atlético Saguntino y la UD Paterna.

El primer paso lo dará la Fundación este mismo mes de julio. Tras presentar Dánvila su plan de viabilidad financiero se abrió un plazo para entregar otras propuestas hasta el lunes 10. La comisión ejecutiva las estudiará el miércoles 12 y el Patronato las votará el día 19 en una reunión extraordinaria.

El ente presidido por Vicente Furió es el máximo accionista del Levante y será quien tenga el voto decisivo en la Junta General de Accionistas en la que tendrán lugar las elecciones que escogerán al sucesor de Quico Catalán. Se tome la vía que se tome esta semana será decisiva, pues es la Fundación quien tiene todo en sus manos. Serán los tres consejeros, doce accionistas y siete instituciones que la componen quienes tengan que tomar las decisiones que marcarán el futuro institucional del Levante. Lo deportivo avanza y a buen ritmo, pero está en juego cuál es el rumbo que sigue una entidad que dentro de dos meses cumplirá sus 114 años de historia.

Arranca julio sin salidas claves