Opinión

Ponerse de acuerdo

La tensión en este momento es compatible con la convivencia. Pasa lo mismo con los fichajes y con el estadio

Anil Murthy y José Bordalás en Paterna

Anil Murthy y José Bordalás en Paterna / VALENCIA CF

En los fichajes no, pero en el blindaje y renovación de Mosquera sí que ha habido consenso. Realmente es lo único en lo que se han puesto de acuerdo todos, incluido Peter Lim. Sin embargo, una vez confirmado el estirón del joven central, el Valencia CF está obligado por una parte a fichar a otro que asegure rendimiento inmediato y por la otra a moverse rápido, sobre todo si como parece al culebrón de Wass le quedan más capítulos. A Bordalás no se le ha pasado el enfado y sigue sin querer saber nada del mercado. Pero la tensión es ahora mismo compatible con una convivencia que se ha vuelto complicada pero no irrespirable. Las cosas pueden decirse más altas, no más claras. Y en lo demás la procesión va por dentro. Al técnico le ha disgustado que le acusen de haberse enrocado con Aridane. Y aún menos que le cuelguen fichajes de los que no se siente responsable directo. Es curioso, pero quien rebobine la cinta se dará cuenta de que hay un nombre que sea da por hecho que fue cosa suya y al que él no se ha referido así nunca.

NUEVO MESTALLA

Sigue la gira institucional de Anil, hoy con parada en el Ayuntamiento. En el caso de las obras pendientes del estadio, la tensión también es compatible con la convivencia, incluso con la cordialidad de las últimas citas. Sin embargo, lo cierto es que los días pasan y en el registro de entrada de la Generalitat no aparece el plan de obra ni el de financiación. Más que en el contenido de la reunión, en principio más de lo mismo, el interés va a estar en la valoración que hagan los protagonistas, en si compran el gesto o mantienen sus dudas. No es fácil y ya hay declaraciones en esa línea que así lo confirman.

NEGOCIACIONES

El futuro del Levante UD no solamente pasa por lo que sus jugadores hagan en el campo sino también por cuál sea su nivel de compromiso en un momento en el que Quico, además de moviéndose con agentes y clubes, anda enfrascado en hacer hueco en el fair-play. Hay varias maneras de lograrlo y no todas pasan necesariamente por tener que sacar a futbolistas que el actual mercado sigue sin absorber.