Todos piden ¿y quién da?

Hay que ayudar, apoyar y alentar a Rubén Baraja, porque de su suerte depende todo el valencianismo. Lo sabemos. Incluso lo sufrimos

Llegada del Valencia y protestas contra Peter Lim y Meriton

Llegada del Valencia y protestas contra Peter Lim y Meriton / F. Calabuig

Sergio Arlandis

Sergio Arlandis

Hay que ayudar, apoyar y alentar a Rubén Baraja, porque de su suerte depende todo el valencianismo. Lo sabemos. Incluso lo sufrimos. Otra cosa será lo que la propia afición entienda como la mejor forma de hacerlo, y ahí poco podemos reprochar o exigir a nadie en concreto, porque cada cual lo hace según su conciencia, sus convicciones y sus experiencias.

Ahora mismo la situación no da para demasiados titubeos emocionales: debemos estar convencidos y convencidas de que lo que hagamos nos debe de sacar de ahí abajo, donde la suela del zapato de Lim nos ha hundido definitivamente. Quien no tenga claro que nuestro peor enemigo lo tenemos en casa es que ha querido mirar para otro lado en todo este tiempo. Supongo que Baraja, que es bastante listo, también sabe esto. Sabemos -de sobra- que la carencia de un proyecto deportivo nos ha traído hasta aquí, de manera progresiva y continua, pues esto no es cuestión de esta temporada: demasiados coqueteos continuos con el descenso en los últimos nueve años. Excesivos, más bien. Y carencias, muchas: empezando por uno de sus diseñadores intelectuales, para quien no hay urgencia de reforzar, pues nada mejora esta plantilla ni existe un equilibrio y armonía perfectos. Todo esto le hace tan culpable, o más, que al propio Lim.

A fecha de hoy, tenemos un técnico capacitado para todo al frente de una plantilla escasamente capacitada para casi nada por su estado anímico. No son malos (bueno, alguno que otro tiene nivel justo para Primera División, pero malo, malo, no), aunque se sientan así, porque las cosas no salen y ahora mismo hay que echar mano de cualquier arenga, de cualquier estímulo que les recuerde por qué ficharon por un club tan grande, aunque entre su juego y las decisiones de arriba lo hayan empequeñecido. Somos una fábrica de vender y una apisonadora para los futbolistas jóvenes.

Hay que ayudar. Ayudemos. Hay que animar. Animemos. Protestemos contra quienes nos han dañado el escudo y siguen haciéndolo, aquí y en Singapur. Sumemos como buenamente creamos que debemos hacerlo y hagamos que Baraja se vea arropado y que los futbolistas se sientan alentados y protegidos durante el partido. Sí, hagámoslo, démosles una lección vital a unos y a otros y con eso no dejemos que nuestra historia como club se rompa y que nuestros mitos se quemen a ritmo infernal. Saquemos nuestro cariño a relucir, nuestra garganta a pasear y que, por lo menos, Mestalla vuelva a ser una caldera como antaño. No lo hagamos por Meriton, ni por nadie más: solo por nosotras y nosotros. Y sigamos protestando al mismo tiempo.

Sí, hagamos todo esto, pero ahora yo, después de hacer todo aquello que me piden o después de ver que reconocen su incapacidad profesional para sacar adelante su trabajo adecuadamente (hablo de los futbolistas), pido, en contrapartida, lo siguiente: que cuando haya niños y niñas o personas mayores esperando horas en los Campos de Paterna, afuera (porque ni tan siquiera les dejan entrar) para ver a los jugadores, se paren, atiendan, dialoguen y no vayan echando humo, bajando una ventanilla, poniendo cara de circunstancias y yéndose, sin más. Solo se paran cuatro. 

Les pido que sean recíprocos con esas ilusiones, con esas gargantas que luego le apoyan cuando ha reclamado tanto y tanto ¿O es que acaso ese gesto de tocarle la cabeza a un niño, de firmar, sin quejarse, un autógrafo, riéndose, con atención, no es necesario para esas personas? O que se paren con los medios de buena gana. O que cuando jueguen tres veces seguidas bien no consideren que el Valencia CF ya no colma sus altas aspiraciones…y es mejor salir a otro club, más grande (no hablo de los jugadores de la casa despreciados por Meriton)… es decir, que no tengan una memoria tan corta. 

Solo pido que la relación sea equitativa, porque el club no deja de pedir al aficionado, sin dar nada a cambio: nos piden confianza en la idea deportiva, cuando ni existe. Nos piden más dinero para los pases, las entradas, las camisetas, etc. lo que sea, pero luego, solo desprecio, vacío.

Javier Tebas

Y ahora Tebas, pidiendo visión global…entiendo que será la misma visión global que nos conduce a él y a Piterman a una de las mayores chapuzas del fútbol español o a la transformación de nuestro campeonato nacional en una copia de la liga escocesa, con dos equipos fuertes y lo demás a mendigar, por poner un ejemplo. La visión global cuando en 2014 decía que no le gustaba que Lim llegase al fútbol español. O cómo actúa la censura en sus retransmisiones y así hasta tener una preciosa perspectiva global que me devuelve a la misma pesadilla de siempre y a la acusación permanente: fuimos los valencianos y bla, bla bla… me cansan sus argumentos (torticeros, altamente injustos y muy sesgados), los de Lim y los de mucha gente que ha orquestado esto. Estaría bien que Tebas investigase cómo el Valencia CF, entre ventas y compras, ha movido más de 1.000 millones de euros y está en bancarrota; o los extraños ajustes que puede hacer el Barcelona, o por qué LaLiga está tan por debajo de la Premier en todo. Es mejor hablar de graves insultos a Layhoon por parte de quienes sí están siendo insultados, menospreciados y explotados. 

Sí, hay que ayudar a Baraja, como sea, porque lo necesita y lo merece, por su historia, su valencianismo y su valentía. Es lógico lo que el bueno de Pipo está pidiendo y debemos corresponderle. Más allá de él, de los embajadores y de los jugadores, me da igual lo que pidan desde el club porque todo lo que tocan huele mal, a podrido, a hollín incluso. Pensemos: si no apoyamos ahora a esta plantilla ¿Qué nos queda?

Suscríbete para seguir leyendo