El mejor Nico está en la posición de pivote

El gallego ofreció su mejor versión desde que llegó este verano. Sustituyó a Guillamón con garantías y demostró que está para más minutos

El centrocampista del Valencia Nico González ofreció su mejor versión desde que aterrizó este verano procedente del Barcelona. Y lo hizo como pivote. La posición que mejor se ajusta a sus condiciones

El centrocampista del Valencia Nico González ofreció su mejor versión desde que aterrizó este verano procedente del Barcelona. Y lo hizo como pivote. La posición que mejor se ajusta a sus condiciones / F. Calabuig

Andrés García

Andrés García

Nico González está para más minutos. El centrocampista del Valencia ofreció su mejor versión desde que aterrizó este verano procedente del Barcelona. Y lo hizo como pivote. La posición que mejor se ajusta a sus condiciones. Ayer quedó demostrado en Mestalla. El gallego aprovechó la oportunidad que le brindó Gennaro Gattuso por las molestias de Hugo Guillamón en la rodilla, asumió la responsabilidad del momento y dio un paso adelante en el campo con fútbol y personalidad.

Era la primera vez que salía de inicio como pivote del Valencia (había jugado de interior contra el Getafe y el Rayo Vallecano) y lo aprovechó con una buena actuación en fase defensiva y ofensiva. Nico habló en el campo y puso fin a una semana de rumores sobre su posible vuelta al Barcelona en el mercado de invierno ante la preocupante pérdida de nivel de Sergio Busquets. El gallego puso orden, distribuyó bien y fue clave (92,1% de acierto en el pase) para garantizar una salida de balón limpia mostrando su repertorio de recursos tácticos. Alternó pases en corto, primeros toques, dos balones en largo (uno peligroso a Toni Lato) y conducciones.

Nico cumplió en la recuperación y dejó un buen pase interior a Edinson Cavani. Su partido como pivote fue completo a pesar de la decepcionante segunda parte del equipo en la que el centro del campo dio un paso atrás, levantó el pie del acelerador y concedió demasiados metros al Elche. Nico cometió la falta a Pere Milla al borde del área que acabó en el primer gol. Al gallego le faltó contundencia en el origen del segundo por el costado izquierdo. Fue el que más corrió (11,4 km/h). No fue un partido del diez, pero las sensaciones del joven futbolista fueron buenas. Y no era fácil porque llevaba en el foco toda la semana y porque la sombra de Guillamón es muy alargada.