Las peñas, otra vez, divididas por Meriton

En la noche del viernes, 24 horas antes de la debacle en el Bernabéu, en la sede de la Agrupació de Penyes Valencianistes se jugó un partido crucial en el terreno social. La asamblea extraordinaria para la modificación de los estatutos enfrentó a varias de las peñas más activas contra la gestión actual del club con la directiva de la APV y su presidente al frente, Fede Sagreras. Él fue el destinatario de dos pancartas en las proximidades escritas por aficionados no peñistas: «Fede, vols Mundial agarra’m el pardal», «Sagreras, no nos representas». 

La jornada había empezado subida de temperatura y acabó aún más caliente después de que, en representación de 131 peñas, el presidente rechazase, dentro de los fines de la Agrupació, un párrafo destinado a promover «incluso con medidas jurídicas» la defensa del Valencia frente a gestiones negligentes por parte de sus dirigentes o máximo accionista. «Salimos muy indignados, las peñas presentes queríamos dignidad y lucha contra personajes como Peter Lim, que están dañando a nuestro club en todos los aspectos», dice Sergi Aljilés, presidente de la Colla Blanc-i-negra. 

Precisamente, la Colla fue la única de las 316 peñas de la APV que en tiempo y forma, en los meses de junio y julio, presentó modificaciones después de haber estudiado y debatido los estatutos. Gracias a la propuesta del colectivo blanquinegro de l’Horta Nord, por ejemplo, la Agrupació «para facilitar la máxima asistencia» a sus asambleas apostará ahora por modernizarse mediante el uso de internet y formatos telemáticos. Además, a propuesta de la Colla, la «defensa institucional del Valencia CF» pasa a formar parte de los requisitos para inscribirse en la histórica asociación de peñas.

No obstante, para el presidente de la Colla, como para el resto de representantes de peñas que pretendían un paso más que institucionalizase la lucha contra Lim, fue «muy grave y una vergüenza» que no se aprobara ese tercer párrafo de nueva creación como un fin del colectivo: «Preservar, salvaguardar y velar por el futuro y bienestar del Valencia CF, adoptando para ello las medidas necesarias, incluso jurídicas, si la gestión de los dirigentes o accionistas mayoritarios pusiese en riesgo la deseable marcha o la existencia del club».

Cuestionado por SUPER, Sagreras argumenta la negativa, en su nombre y en el de 131 peñas, diciendo que «la misión de la APV no es emprender acciones jurídicas, para eso ya hay otras asociaciones». «No nacimos con ese objetivo ni tenemos un mecenas detrás para entrar en demandas que pueden ser muy costosas. Es más, en asambleas anteriores no se habló de recurrir a los tribunales», indica. Según Sagreras, en virtud del artículo 6 sobre capacidad y el 17 sobre competencia del órgano de representación, «podría llegado el momento actuarse legalmente contra un mal gestor». Si el art. 6 habla de «defensa institucional», el 17 afirma que la Junta directiva es competente para «tomar los acuerdos necesarios para la comparecencia ante los organismos públicos, para el ejercicio de toda clase de acciones legales y para interponer los recursos pertinentes».

Sin embargo, para las peñas más comprometidas en el objetivo de oposición a Lim -Colla, Minuto 42, Alcàsser, Luna de Valencia, Llamosí o Collonuts, entre muchas otras- el «no» a este punto «va en contra de los acuerdos de las asambleas extraordinarias de agosto de 2020 (Alzira) y febrero de 2023 (València, Petxina)». Aljilés agrega que pretende «justificarse y tumba todo por la palabra jurídicas». De hecho, el exvicepresidente de la APV, Manu Gálvez, presidente de Minuto 42, así lo manifestó, y fue aplaudido por ello. Cabe recordar que hace ocho meses las peñas acordaron «romper toda relación con Meriton», y que «la Agrupació lidere la lucha contra Meriton de manera notoria y pública».

TENSIÓN

Uno de los momentos más caldeados de la asamblea vino cuando miembros de la directiva se encararon con Javi Martínez, presidente de la PV Llamosí y miembro de Libertad VCF, después de que este dijese que la APV se la «sudaba» como respuesta en una discusión con Fede Sagreras. Este diario contactó también con Martínez, que critica la tardanza con la que la directiva envió las propuestas de modificaciones para que cada peña pudiese estudiarlas y estar informada previamente a las votaciones, una cuestión que pidió que constase en acta. «Si no lo dicen los estatutos, están obligados a ser transparentes por la ley nacional o autonómica. La Agrupació es una dictadura a medida para perpetuarse en el poder», sentencia el presidente de Llamosí, al que uno de los directivos amenazó con proponer su expulsión en los próximos días. Tras lo acontecido el viernes, planea en el ambiente la opción de una asociación de peñas alternativa, complementaria con la voluntad de Libertad de estrechar relaciones con las peñas. En este sentido, la asociación ‘antiLim’ publicó durante el fin de semana en su perfil de ‘X’ que planteará en su próxima asamblea, a finales de noviembre, la «posibilidad a las peñas valencianistas de asociarse a Libertad VCF y encontrar un lugar donde unirse en la lucha por su club y su supervivencia, que la directiva de la APV les negó».

MODIFICACIONES

Entre los cambios en los estatutos, la directiva de las peñas sacó adelante, no exenta de polémica, la prohibición de entrada a la Agrupació de asociaciones que la hayan «difamado, maltratado o insultado» o tengan «abierto algún expediente disciplinario o denuncia en contra». Por otro lado, la Colla Blanc-i-negra consiguió introducir el compromiso de velar porque los peñistas puedan ejercer sus derechos libremente, especialmente, en Mestalla. En cambio, no se incluyó la negación explícita del «machismo y la LGTBIfobia» en los fines, petición, promovida también por la Colla, que quedó entre las actividades.