Mehmet Topal no quiere descartarse para el partido ante el Barcelona del próximo 16 de octubre en el Camp Nou. Un día después de sufrir un esguince de grado uno en el tobillo derecho en un mal giro durante un entrenamiento, el turco abandonó ayer la Ciudad Deportiva de Paterna andando sin la ayuda de las muletas, que le acompañaron el día anterior. El jugador es optimista. El dolor es ya menor y el centrocampista quiere acortar el plazo de recuperación, estar listo en menos de diez días y así llegar al partido ante el Barça, pero el cuerpo médico del club quiere ser cauto, ante una lesión cuyo período de recuperación está estimado en dos semanas, y no forzar al jugador y esperan que pueda estar al cien por cien ante el Glasgow Rangers del día 20.

El jugador turco realizó ayer trabajo de recuperación con los fisios en piscina, tratamiento que prolongará en los próximos días, aumentando progresivamente las cargas de trabajo para ir poco a poco incorporándose al trabajo y los entrenamientos colectivos, aunque en todo caso, si la evolución es la esperada, sería a finales de la próxima semana cuando pueda estar a las órdenes de Unai Emery. En un principio los servicios médicos del club no quieren descartar todavía al mediocentro para el partido ante el conjunto blaugrana y prefieren esperar a ver la evolución de las molestias.

Topal se lesionó en un lance fortuito del entrenamiento del lunes en Paterna. Clavó la bota derecha en el césped mientras perseguía el balón con la mirada y giraba el cuerpo. Una combinación fatal que acabó con el jugador en el césped retorciéndose de dolor. Unos gestos que hacían saltar todas las alarmas. Tras realizarse las pertinentes pruebas, se le estimó un período de recuperación de dos semanas. Topal ha jugado cinco —tres de Liga y dos de la Champions— de los ocho encuentros en el inicio de temporada, en cuatro de ellos como titular.