Mérito 'groguet' incluso en la derrota

Esta vez los penaltis no sonrieron a un Villarreal CF que puso contra las cuerdas al campeón de Europa; se adelantó el Chelsea con un tanto de Ziyech y Gerard Moreno forzó la prórroga

Vicente Linares

Vicente Linares

Lo del Villarreal tiene un mérito de locos. Incluso en la derrota. El equipo de Unai Emery llegó otra vez a los penaltis ante un potentísimo rival y aunque en esta ocasión no se pudo ganar, lo conseguido por este equipo queda ahí. Kepa le paró el séptimo penalti al Albiol en la tanda y la Supercopa se va a Londres aunque bien pudo venirse a Vila-real. Orgullo 'groguet'.

Sería injusto no admitir que en el inicio del choque los ingleses fueron mejores y al filo de la media parte un desmarque en diagonal de Havertz lo aprovechó el alemán para sacar un centro atrás que Ziyech remató mordido pero a la red (1-0). No perdonaban los de Tuchel en su segunda oportunidad clara del choque -antes Werner había rematado un córner de volea obligando a Asenjo a hacer una acrobática parada- y aunque el Villarreal intentó responder en dos llegadas peligrosas de Yeremi, la ocasión inmediata para empatar llegó en el 32’ en un balón de Foyth a Dia que Mendy sacó con una excelente parada tras el duro remate del reciente fichaje groguet. Boulaye se mostró activo en su primer partido oficial y parece evidenciar que puede ser un jugador muy peligroso, que no es poco.

Quizás en ese primer acto -o en esa primera media hora- el Villarreal, aunque sea tirar de lógica, echó un poquito de menos la presencia de Dani Parejo a la hora de atar ese primer pase que le permitiese lanzar los ataques e incluso a la hora de ejecutar las acciones a balón parado, más aún si se recuerda el gol de Gdansk con aquel balón con lazo que remató Gerard.

El Chelsea se impone al Villarreal en la final de la Supercopa de Europa

El Chelsea se impone al Villarreal en la final de la Supercopa de Europa

En una final de momentos, uno decisivo pudo ser el del balón estrellado en el travesaño por Alberto Moreno tras empalar un muy buen centro de Gerard Moreno. Fue al filo del descanso en una recta final del primer acto en la que el Villarreal había ganado presencia ya hasta el punto de obligar a hacer una falta muy peligrosa a Rudiger en la frontal que le costó la amarilla al central del Chelsea. Habría cambiado el panorama totalmente de cara al segundo acto ese pelotazo al al larguero, pero se fue al limbo y al conjunto de Emery le tocó entrar en la segunda mitad por detrás en el marcador.

Comenzó mejor el Chelsea, pero poco a poco el Villarreal fue encontrándose bien. La segunda mitad fue un recital 'groguet': tuvo dos palos y a la tercera Gerard no falló. El equipo forzó hasta los penaltis y esta vez salió cruz

Quizás obligado por la desventaja, el conjunto groguet reanudó el encuentro dominando y ahí llegó la otra acción clave en un mano a mano entre Gerard y Mendy en el m. 51 que el guardameta desvió levemente con la yema de sus dedos y que se fue a impactar en la base del poste.

El gol de Gerard Moreno, merecido por el Villarreal CF

Los de Emery la habían tenido nuevamente y en esas situaciones lo normal es acabar pagándolo muy caro, pero de nuevo apareció el delantero referencia y recientemente renovado del Villarreal para combinar con Dia y enviar una pelota a la escuadra en el minuto 72’ que devolvía las tablas al marcador (1-1). Otra vez Gerard.

El Villarreal CF pasó por encima al Chelsea en la segunda mitad

El Submarino estaba pasando por encima en esa fase del encuentro de ese Chelsea que la pasada campaña se mostró infranqueable, pero tras el empate quien volvió a coger la manija del encuentro fue un conjunto, el ‘blue’, que ya sin Kanté pivotó alrededor de un Jorginho que había entrado de refresco. Pareció una cuestión metal.

Así se llegó a la prórroga en la que Emery agitó el árbol cambiando a una defensa impar (antes ya había movido ficha pasando a Foyth del lateral derecho al doble pivote) con el afán de aplacar el ánimo del conjunto londinense, que pudo marcar tanto en un disparo de Pulisic que se fue fuera como en otro de Mount al que Asenjo de nuevo reaccionó a la perfección.

La prórroga ya agonizaba y entre dos estrategas la última ‘respuesta’ de Tuchel a Emery fue meter a Kepa en el terreno de juego en el minuto 119 para la tanda de penaltis, en la que paró dos lanzamientos clave. Fue el jaque mate.