Sanción por Covid

Si ya no era bastante con que el coronavirus haya infectado a personas, pero también a nuestras vidas, y que las competiciones sufran sus estragos, en términos de falta de espectadores y otros menesteres, ahora viene un asunto que traerá cola, por las consecuencias deportivas que va a suponer.

Y es así porque la federación italiana ha decidido, tras una instrucción que dura desde octubre pasado, pasar al tribunal federal que juzga esos casos, su instrucción acerca de los fallos que tuvo la Lazio de Roma, respecto de los protocolos anti-covid que aquella había reglamentado.

Esas reglas están hechas para impedir una propagación del virus en el fútbol profesional italiano y, por el bien de todos, pero la Lazio, al parecer, tuvo ese punto de picardía que nos recuerda a las películas de ese país, donde el más listo saca siempre ventaja.

Pues la jugada les puede salir por la culata, como el tiro aquél, ya que se enfrenta a unas sanciones que pueden ir desde una multa, pasando por retirada de puntos o, incluso, la expulsión del campeonato de Liga. El club laziale tuvo varios encontronazos covidianos pero, a pesar de la obligación de indicarlos, prefirió mantenerlos en secreto e, incluso, saltarse cuarentenas que había de cumplir.

Así, en dos encuentros de la Champions, allá por noviembre pasado, tanto en Brujas como en San Petersburgo, a pesar de positivos en el club (no se dice si solo fueron jugadores o más miembros del mismo), no advirtió de ello a las autoridades locales, cuando era su obligación.

También permitió, el 3 de noviembre, que tres jugadores del primer equipo, que había sido diagnosticados como positivos, entrenaran no solos, como era reglado, sino con todo el grupo de futbolistas, sin tener en cuenta ningún protocolo de protección. Y, además, no puso en cuarentena, obligada por las reglas, de 10 días, a varios jugadores en los partidos en octubre contra el Torino y en noviembre contra la Juve. Toda esa retahíla de incumplimientos ha sido revisada por el instructor y llevados al tribunal que juzgará tanto al club en sí, como a su presidente, el siempre polémico Claudio Lotito y a dos miembros del equipo médico.

Todos estamos pendientes de lo que pueda suceder y de la sanción que le haya de recaer a la Lazio, porque, a pesar de que ha habido decisiones disciplinarias de perder partidos o eliminatorios por no tener suficientes jugadores (como el caso del Slovan Bratislava en una eliminatoria europea en octubre pasado, por ejemplo), aquí se trata no de un simple partido, sino de juzgar una serie de incumplimientos, a sabiendas de que lo eran, y de esconder hechos que podrían haber producido más contagios.La sanción más grave sería la exclusión del campeonato italiano

y muchos se la esperan, aunque, a mi entender, podría quedarse en una deducción de puntos. Pero, aun así, sería un serio aviso para navegantes, en aras a evitar utilizar la picaresca para continuar jugando.

Ahora que está vacunándose, con mayor o menor rapidez, se nota que ese hecho está reduciendo en gran medida la fuerza del virus y no es el momento de usar trucos. Veremos lo que le cae a la Lazio... Mientras, hagamos fuerza y calculemos cuando nos tocará a cada uno de nosotros, porque estamos llegando al final, o eso espero. Y, recomiendo el libro de Susana Martín Gijón, «Especie», que son escalofríos, pero al menos esos son ficticios.

Más opiniones de Juna de Dios Crespo.