Calma tensa en la 'batalla de París'

El tira y afloja de Mbappé y Luis Enrique de estas últimas semanas está a la orden del día en París

Mbappé-Luis Enrique

Mbappé-Luis Enrique

Es inevitable que en Francia se hable de otra cosa. Si hay un futbolista capaz de acaparar todos los focos e impresionar a propios y extraños, ese es Kylian Mbappé. 

De hecho, el egocentrismo que gira en torno al futbolista provocó que el pasado viernes se hablara incluso más de su sustitución al descanso que del empate del PSG.

Si bien es cierto que el conjunto parisino tiene media liga en su bolsillo, y que disputó el encuentro ante el Mónaco con la mente puesta en la vuelta de los octavos de Champions del próximo martes, el 'tira y afloja' entre Luis Enrique y el propio Mbappé no da tregua.

Del campo... al palco

Tras ser sustituido al descanso en el Stade Louis II, Kylian Mbappé protagonizó una imagen algo sorprendente. Apenas sudó en los primeros 45 minutos del partido y, por lo tanto, su participación fue nulaLuis Enrique volvió a prescindir de sus servicios y cedió su puesto a Randal Kolo Muani.

Pero lo curioso de todo esto fue que el francés no vio el resto del partido desde el banquillo, sino desde el palco, donde se le vio junto a su madre y agente, Fayza Lamari.

Después de la tormenta, llega la calma

Todo indica que ambas partes parecen haber alcanzado una tregua con la decisiva vuelta de los octavos de final de la Champions en el horizonte.

San Sebastián acogerá este martes una cita en la que los de Luis Enrique parten con cierta ventaja respecto a la Real, tras el 2-0 en el Parque de los Príncipes.

Mbappé dio el paso y el sábado antes de la sesión de entrenamiento tocó la puerta del despacho del técnico para pedirle explicaciones. Porque el pasado 13 de febrero, en la previa de la ida, Luis Enrique aseguró: "Cuando un equipo tiene un jugador de la categoría de Kylian, lo único que podemos entender es que cuanto más juegue mejor, para beneficio del equipo".

Pero la respuesta que encontró iba en línea con los argumentos que lleva dando el entrenador en las últimas semanas: el equipo se prepara para jugar sin él.

Charla sin garantías

Pese a las buenas palabras, Luis Enrique no le prometió más minutos ni más indulgencia. Eso sí, le aseguró que estaría en los duelos clave, empezando por el choque de Anoeta del martes.

Y el técnico aprovechó, además, para reprocharle que estas últimas semanas le ve menos implicado en la vida del club y que eso se traduce en un menor rendimiento en el campo.

Así pues, Luis Enrique espera sacar un doble beneficio de esta tensión. Por un lado, motivar al futbolista para que salga con ganas de comerse el césped y, por otro, implantar definitivamente su creencia de que el colectio debe de estar por encima de toda individualidad.