Los nuevos radares de la DGT para multar en los tramos en obras

El 2023 está siendo un año movido para la Dirección General de Tráfico (DGT) y los conductores por la cantidad de cambios que introdujo la nueva Ley de Tráfico en 2022. La DGT ya ha publicitado los cambios normativos que han entrado en vigor en los primeros meses del año pasado, así como la nueva norma para pasar la ITV en nuestros vehículos.

El ente que dirige Pere Navarro tiene entre ceja y ceja bajar drásticamente la cifra de accidentes en las carreteras españolas, ya que 2021 fue un gran año en cuanto a números de siniestros fatales en España, todo y que 2020 estuvo marcado por la pandemia.

Las autopistas y las autovías en España cada vez son más seguras y en los datos del último año se refleja ese notable descenso de las muertes. No obstante todavía quedan ítems por resolver como por ejemplo, en mayor medida para vehículos pesados, los famosos puntos muertos.

Los nuevos radares de obra y sus multas

La DGT está empleándose a fondo para tener controladas todas las posibles infracciones y evitar excesos de velocidad que comprometan la seguridad vial. Hay tramos en los que no se suelen cumplir los límites, como por ejemplo los de obras. Y tienen mucho peligro porque a veces no vemos la maquinaria y pensamos que no hay nadie trabajando y nos dan ganas de ponernos a la velocidad permitida habitual aunque en cualquier momento pueda haber alguna incidencia y para entonces sea demasiado tarde.

Desde septiembre de 2022 se puso en marcha este nuevo método de detección de velocidad y en una semana de pruebas hubo 3.400 multas. A nivel recaudatorio es éxito seguro para la DGT, pero lo importante es evitar los accidente, por lo que los radares de obra han llegado para quedarse. Eso sí, en caso de que sea fijo es obligatorio que haya una señal que avise de que hay un radar en el inicio del tramo limitado y nos recuerde la velocidad máxima.

Lo que ha instalado la Dirección General de Tráfico son cabinas de radares tanto fijos como móviles en los tramos en obras. Algunos te advierten con un cartel luminoso de la velocidad con una cara enfadada y roja o sonriente y verde, al estilo de lo que ya vemos en algunas ciudades. En cualquier caso es imprescindible respetar los límites porque en cualquier momento pueden aparecer operarios trabajando en zonas de baja visibilidad.