Lim debe hacerse un Piqué

El sábado estuvo en la tángana final que propició Ferran, justo enfrente desde donde miró Mestalla desde hace unos años. Seguro que ya tenía la decisión tomada, así que ese Piqué que aspira a presidir el Barça algún día debería haber calmado al de Foios, y explicarle que esto del fútbol se hace largo cuando vas cerrándote puertas. Habrá que seguir los pasos del central que cuelga las botas para influir todavía más en Rubiales.

Así que, aprovechando la cobertura mediática de una retirada, creo que es lo mejor que puede hacer Lim en estos momentos, irse. Está claro que no va a poner dinero para terminar el estadio de Corts Valencianes -una ocasión perdida para el Lim Arena- y que lo único que pretende es revalorizar jugadores para cobrar la plusvalía de una posible venta, según Gattuso.

Lim debería hacerse pronto un Piqué si quiere hacer un favor, otro, a Amadeo Salvo y Aurelio Martínez, que el 29 de marzo, diez días después de la Cremà, deberán contar la verdad y toda la verdad sobre el timo de la venta del Valencia a Meriton delante de un juez. En caso contrario, el peor presidente de la historia de Mestalla y el catedrático de lo fugaz, van a pasar cinco meses de infierno, porque no contemplo que les dé un ataque de dignidad para admitir su gran error.

Veinte semanas con los focos puestos en un proceso de venta que ha dejado el Valencia como un equipo de media tabla y un club dirigido por burócratas asiáticos sin ninguna empatía hacia el valencianismo. Cerca de 150 días donde se recordarán todas y cada una de las promesas incumplidas, y se reproducirán aquellos mítines de populismo barato y cartulinas trucadas.

Un tiempo que irremediablemente volverá a sacar los nombres de aquellos que votaron a favor de Meriton en la Fundación. Algunos con carreras públicas amortizadas, pero otros con alguna proyección social en alguna entidad prestigiosa y solvente, que también quedará señalada. 

Porque, además, el equipo no llega al parón del Mundial con buenas expectativas. Veremos qué pasa mañana en San Sebastián, antes del decisivo partido del jueves ante el Betis. Los números siempre dejan a la intemperie los afectos, y por muy bien que haya caído Gattuso en la grada, hay necesidad de puntos.

Si además durante el reposo mundialista hay alguna operación extraña que perjudique todavía más a la plantilla, pienso en la posible vuelta de Nico al Barcelona, la relación entre los de Lim y la afición será todavía más insostenible.

Una retirada a tiempo es una victoria. Eso es lo que deberían decirle los asesores valencianos de la presidenta Lay Hoon Chan, y ella como persona inteligente que es decirle a Peter Lim que se mire en el espejo de Gerard Piqué.

Suscríbete para seguir leyendo