Mejor ‘Baraja’ que el mercado de ‘fichajes’

Si a falta de dos meses para el mercado, el futuro pasa por Yaremchuks y Cenks, mejor si no se depositan expectativas en esa bala

Baraja saluda a un chaval en la ciudad deportiva de Paterna

Baraja saluda a un chaval en la ciudad deportiva de Paterna / JM LÓPEZ

Rafa Marín

Rafa Marín

Para el mercado de enero faltan todavía dos meses pero para el partido del Granada apenas unas horas, así que no hay debate sobre qué es tanto lo urgente como lo importante. Más todavía teniendo en cuenta cómo llega el rival de esta tarde. Con los apuros de Paco López tras haber sumado seis puntos de 33 y encajado la friolera de 28 goles, solo tres menos que el colista Almería, lo que se presagia en Mestalla es una oportunidad de oro para meter tierra de por medio con el que sigue siendo el objetivo oficial marcado por la presidenta itinerante. Los de Baraja siguen por encima de las expectativas, lo cual es realmente difícil porque no hay jornada a la que no se llegue cogidos con pinzas. Una victoria invitaría a abrir los brazos a un futuro mejor, mientras que un empate o una derrota serían sinónimo de mantenerse en el barro. El Valencia tiene un once competitivo gracias al trabajo del míster y la entrega de los chavales, pero a partir de ahí, ya nada más. Lo del banquillo es un juego de niños, no necesariamente para mal. Y lo de los fichajes con el OK de Lim, un auténtico drama. Si a falta de los mencionados dos meses para el mercado invernal, el futuro pasa por Yaremchuks y Cenks, mejor no depositar ninguna expectativa en esa bala. Además, el personal está ya curado de espanto. No se trata únicamente de fichar sino de que sirva para algo. Todo el mundo ve, salvo de quien depende la luz verde, lo fácil que sería darle un empujón a la plantilla con un par de retoques. Pero la guerra no está ahí, ni en los viajes a Singapur, ni en los mentideros donde nunca aciertan. La guerra está en que Baraja siga a lo suyo, en que el equipo tenga una identidad y en que los chavales que llegan lo hagan para quedarse. Mestalla tiene la llave para disfrutar lo poco que se pueda y que quede claro que el único plazo que importa no es el del mercado de fichajes sino en el de la fecha de caducidad de Lim como máximo accionista del Valencia.

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