La salvación virtual en enero

El Valencia está salvado de forma virtual en el mes de enero. Con casi toda la segunda vuelta en juego. Con cuatro meses de adelanto respecto al sufrimiento de la temporada pasada. No es matemático, pero el equipo se aseguró ayer prácticamente la permanencia y mira hacia arriba en la clasificación con 18 jornadas todavía por delante. Rubén Baraja ha conseguido el objetivo establecido por la presidenta Layhoon Chan en verano mucho antes de lo que nadie esperaba. El Pipo ha conseguido un milagro con una plantilla peligrosamente corta e inexperta. Y lo mejor puede estar por llegar. Los jóvenes no paran de crecer. El equipo tiene la flecha hacia arriba y va a por todas. 

El equipo de Baraja se ha disparado en la tabla de clasificación con una brillante racha de 10 puntos sobre los 12 últimos gracias a las victorias contra el Cádiz, Villarreal y Rayo Vallecano y el empate con sabor a triunfo contra el Barcelona. La salvación matemática es cuestión de tiempo. El golpe de autoridad en el Nuevo Mirandilla contra uno de los rivales directos por el evitar el descenso es casi definitivo. Los del Pipo hundieron al Cádiz (gritos de «Sergio, vete ya!» al final del partido) y abrieron una brecha de 14 puntos respecto a la zona roja que marca precisamente el equipo gaditano en plena crisis de resultados. Mucho van a tener que cambiar las cosas para que Cádiz, Granada y Almería se salven. 

El Valencia no tiene techo. Tiene el objetivo de la permanencia en el bolsillo y crece a la velocidad de la luz mirando siempre hacia arriba. ¿Y ahora qué? El tiempo dirá si el Valencia es capaz de luchar por los puestos europeos a final de temporada. Lo cierto es que cierra la jornada en octava posición a solo 2 puntos de la séptima plaza ahora mismo propiedad del Betis. El partido del sábado contra el Athletic en Mestalla será clave para comprobar las posibilidades reales del equipo de cara a jugar la próxima temporada en Europa. 

La dinámica ahora mismo del Valencia de Baraja es la de un equipo que lucha por objetivos ambiciosos. El Pipo priorizó la Liga, sacó el mejor once posible y firmó su tercera victoria consecutiva en el campeonato liguero por primera vez en la temporada. Algo que no sucedió en el Valencia desde hace dos años. Para encontrar la última racha de tres triunfos seguidos hay que remontarse a finales de 2021. Fue entre el 5 y el 20 de diciembre de 2021 durante las jornadas 16, 17 y 18. El equipo ganó al Celta en Balaídos (1-2), derrotó al Elche en Mestalla (2-1) y se llevó el Derbi del Ciutat contra el Levante (3-4). El año pasado, ni Gattuso ni el propio Baraja fueron capaces de conseguirlo. 

El equipo se acuerda de Diakhaby tras la victoria en Cádiz

Más allá de los números, lo mejor de ayer fueron las sensaciones. Baraja ha conseguido acelerar el proceso de maduración de sus jóvenes futbolistas. Ayer se revelaron en medio de la emboscada de Cádiz y dieron una lección de competitividad digna de ‘veteranía’. El Valencia crece en la tabla y como equipo y llega a la eliminatoria de octavos de final de la Copa a partido único en Mestalla en el mejor momento de la temporada. Que siga la fiesta el miércoles, Pipo. 

Suscríbete para seguir leyendo